Esta misión forma parte del bloque de secundarias que te recomendamos llevar a cabo al final de Una guerra que podemos ganar. Encontrarás este puesto de control en medio de la carretera, pasada la Infestación del río Tumblebugg, así que es complicado pasarla por alto si estás reconociendo el terreno.
Como otras veces, lo primero al llegar es ir siguiendo los cables del tendido eléctrico y cortar todos los cables de altavoces, o bien disparar directamente a los reflectores que haya en postes en los que haya altavoces.
Asegúrate de desactivarlos todos, porque estás cerca de una zona infestada y no querrás tener un enjambre entero en tu chepa. Masticando tu chepa, quiero decir.
En esta ocasión, dar con una lata de gasolina no será complicado, porque hay varias. Tienes al menos dos, una en el camino que habrás seguido por la carretera para llegar hasta aquí (la verás de frente) y otra cerca de la entrada del túnel. Vamos a aprovechar la misma imagen para señalarte la posición de una lata de gasolina y la del generador (la lata está en la zona tras las cajas que señalamos a la derecha).
Si no das con ella, la otra lata está directamente junto al intermitente trasero izquierdo del autobús escolar, no tiene pérdida. Como siempre que hay dos edificios, en uno encontrarás el inyector que hace que termine la misión y, en el otro, una grabación. En este caso se trata del artículo Registro de NERO 27 - Grabación de unidad médica móvil 1682.
La Historia El fin del mundo sube al 75%. Consulta el final de Una guerra que podemos ganar para ver qué te recomendamos hacer ahora.