Final Fantasy VII Remake no se termina sin más cuando acabas la historia. Desbloquearás un modo de selección de capítulos, así como la opción de jugar en modo Difícil, donde no podrás usar objetos en combate y los bancos no recuperan PM al descansar. Así que cualquier ayuda viene bien. Aquí vamos a explicarte cómo conseguir el accesorio Crepúsculo universal, y qué papel juega en hacer que el modo Difícil no sea TAN difícil.
Una pequeña advertencia: evidentemente, no será fácil de conseguir.
Pero en serio, vale mucho la pena el esfuerzo.
Cómo conseguir el Crepúsculo universal y qué hace
Bueno, lo primero es que tienes que haber terminado el juego para poder acceder a él. Una vez lo hayas hecho, desde selección de capítulo vete al Capítulo 17 y accede al simulador virtual secreto. Ahí te enfrentarás a varios desafíos de nivel difícil. El que te interesa es el desafío Grupo de tres vs. Confidenciales, que implica derrotar a varios superbosses. Si consigues superarlo, conseguirás el Crepúsculo universal.
¿Que qué hace? Bueno, lo que hace es que el personaje que lo lleve equipado empiece todos los combates con el Límite cargado. Además, una vez lo haya consumido, irá regenerando la barra de Límite constantemente, por lo que tardarás bastante menos en tenerlo de nuevo a tu alcance. Esto implica, por ejemplo, que en modo Difícil puedes empezar el combate con el Escorpión guardián con Catástrofe de Barret, haciendo un daño monstruoso que puedas usar como ventaja táctica. Una opción más adelante será la de poder usar Protectora del planeta con Aeris al principio de cada combate, con lo que contarás con un rato de invulnerabilidad ante todo daño físico que puedes aprovechar para diezmar al enemigo. Como verás, supone una ventaja estratégica de lo mas interesante para poder rebajar un poco el nivel de dificultad...