Esta misión secundaria de la región Despertar estará disponible tras completar La bestia nacida del humo y las llamas. Oscuros Presagios cubre una zona nueva, que tiene coleccionables igualmente nuevos. No te preocupes, como todas las secundarias, es corta.
Oscuros presagios
- Nivel recomendado: 13.
- Coleccionables en esta misión: 3 Kodamas.
- Recompensas: Ceniza sagrada, Piedra espiritual pequeña x3, Kusarigama de Genin, Matón: Guardarrenes.
Avanza por el único camino posible. Esta vez, en vez de un par de monstruos, habrá dos humanos en el sendero.
Continúa hasta llegar al cruce donde tienes una casa a tu derecha: dentro habrá dos enemigos y, en el pequeño sendero de detrás, tras unas cajas, estará el primer Kodama de la misión.
Empieza a subir por el sendero con cuidado: tras la valla junto a la casa, habrá un enemigo oculto a la derecha. Desde aquí, intenta acabar con flechazos a la cabeza con tantos enemigos como puedas antes de ascender, y ve repitiendo. Son muchos y podrían rodearte fácilmente. Sigue subiendo hasta que veas que a tu izquierda hay tres Yokai nuevos (una especie de samuráis que pueden disparar proyectiles con su brazo), una neblina oscura detrás de la que saldrá un Enki y un camino a seguir a tu derecha.
Empieza por ir hacia los Yokai samurái y el Enki, pero no cruces la siguiente puerta colina arriba. En lugar de eso, fíjate en que puedes bajar por una pendiente (ojo con el Gaki en la maleza) hasta una puerta que abre el camino al altar del principio. Después de abrir la puerta, regresa al cruce de la imagen y sube las escaleras hasta el punto que señalamos.
Cruza y estarás en una cornisa sobre el nivel del suelo normal de esta zona de reino de los Yokai. Al fondo habrá uno de esos samurái Yokai y el segundo Kodama del nivel. Desde este punto, además, estás en una posición ventajosa para usar flechas sagradas contra el Yoki que patrulla la zona abajo. Cuando se acerque al recibir daño, salta sobre él y ataca para dejarle listo de papeles sin peligro.
Al acabar con él se disipará el efecto de la maldición, acércate al altar que hay en el campo (ojo con los Gaki) y luego sube las escaleras otra vez. No entres al santuario, en lugar de eso pasa de largo. Darás con un par de enemigos a los que puedes pillar por la espalda y una pequeña habitación. Al pasar por ella verás que vas colina abajo: estás yendo al punto de los tres samuráis Yokai y el Enki. Ojito porque hay un enorme Oni uniojo (un ogro) antes de la pendiente, al pie de las escaleras. Pues bien, en la pendiente, después del ogro, fíjate en que puedes encontrar al último Kodama.
Finalmente, vuelve a subir al santuario y, en la terraza, abre la puerta a la sala principal. De la neblina saldrá un peligroso enemigo pájaro. Para evitar que te mate, lo ideal es poner algo de distancia y esquivar a un lado alguno de sus ataques con salto. Ojo a sus combos a corta distancia, suelen terminar con ataques giratorios sobre sí mismo a destiempo y que pueden pillarte con la guardia baja.
La luz para completar la misión aparecerá en cuanto acabes con el monstruo.