Nioh 2 cuenta, a lo largo de sus muchas misiones de historia, con una cantidad bastante importante de jefes a los que derrotar. Para intentar ponerte las cosas fáciles, como hemos hecho otras muchas veces, queremos ayudarte a derrotarlos a todos. En este caso nos centramos en Shuten Doji, el jefe de El mausoleo del mal.
Se trata del decimonoveno jefe de la historia al que te enfrentarás.
Si sabes lo que hacer, la cosa será bastante más fácil de lo que parece, ya lo verás.
Shuten Doji: ataques y cómo derrotarlo
Lo primero que debes saber es que este combate tiene truco: no debes atacar al jefe, al menos no al principio. Entre los distintos ataques que va haciendo Shuten Doji, todos brutalmente predecibles, verás que con varios bebe de la calabaza que lleva en la cintura. La gente, cuando bebe, se emborracha, y se ve que los Yokai también. Lo que tienes que hacer es moverte entre las piedras espirituales y hacer que las golpee. Esto hará que su calabaza "se cargue", y verás cómo llega un punto en el que está borracho, entra en reino oscuro y se tambalea constanemente. Aunque siga atacando, será infinitamente menos peligroso, y el efecto dura un buen rato. Procura no golpearle hasta que esté borracho, para no romper la amrita de la calabaza.
Con esto presente, como decimos, sus golpes son bastante predecibles. Te intentará aplastar con el kanabo, nada imaginativo. Su primer ataque de furia es al mismo tiempo ataque de agarre. Si lanzas inmediatamente el contraataque no le harás daño, pero lo interrumpes, cosa que te interesa porque tiene un alcance y velocidad obscenos. Cuando veas que agita el pelo, échate atrás, no intentes defenderte. Son varios ataques de área físico y de fuego, lo que no te conviene lo más mínimo. También puede lanzar llamas en arco, o lanzar pequeñas bombas de fuego a su alrededor. Realmente sólo es peligroso si no sabes lo de que se le puede emborrachar, no te preocupes.