Una de las grandes novedades de Bloodborne son las Mazmorras Cáliz, una serie de mazmorras opcionales con diseños de niveles aleatorios. Para acceder a ellas necesitaremos el Cáliz del tipo de Mazmorra que queramos crear y los materiales que nos indiquen para hacer el ritual en cuestión.
Existen diferentes cálices y tres de ellos los obtendremos de ciertos jefes opcionales. Nuestro objetivo en ellas es bien simple: bajar pisos derrotando jefes hasta llegar al final.
Eso sí, para acceder al enemigo final de cada piso tendremos primero que encontrar una palanca que nos permita llegar hasta él. Una vez lo derrotemos, podremos pasar al siguiente nivel.
Estas mazmorras tienen diferentes niveles de profundidad. Mientras mayor sea, más poderosos serán los enemigos de su interior, aunque también serán mejores las recompensas que podremos encontrar en ellas. Las de profundidad 1 y 2 son relativamente fáciles, las de 3 suponen un reto aceptable, y las de 4 y 5 os harán sufrir de verdad, ya que ofrecen los desafíos más duros de todo el juego.
Además, a cada ritual le podemos añadir ofrendas extras para dotar a la mazmorra de propiedades especiales que la harán todavía más difícil, pero claro, los beneficios que obtendremos en ellas también serán muy superiores. Los cuatro rituales adicionales son los siguientes:
- Ofrendas fétidas: Los enemigos hacen mucho más daño.
- Ofrendas podridas: La mazmorra tendrá muchos más enemigos de lo normal y se incrementará la probabilidad de encontrarnos con trampas.
- Ofrendas malditas: Reduce nuestra vida máxima a la mitad y hace que todas las gemas que encontremos sean del tipo "maldita".
- Campana siniestra: habilita las invasiones en la mazmorra.
Otro detalle que hay que tener en cuenta es que solo los cálices que lleven en su nombre la palabra "raíz" nos permitirán crear mazmorras con diseños aleatorios. En cambio, si no llevan este término tendrán un diseño predeterminado que será el mismo para todos los jugadores. Estos se suelen conseguir derrotando a los jefes de las Mazmorras Cáliz predefinidas. De hecho, de esta misma forma también obtendréis la mayoría de los cálices que os llevarán a las mazmorras de mayor profundidad.
Un detalle a tener en cuenta es que las Mazmorras Cáliz se pueden compartir con otros jugadores para que las descarguen y las jueguen, lo que también permite el juego tanto cooperativo como competitivo y que se llenen de manchas de sangre y de mensajes de ayuda. Eso sí, solo podremos descargarnos las mazmorras que sean del mismo tipo que hayamos creado nosotros por lo menos una vez. De este modo, si, por ejemplo, todavía no habéis realizado el ritual del Cáliz Pthumeru Inferior, no podréis descargar las mazmorras que otros jugadores hayan creado utilizando este cáliz.
Finalmente, mencionar que la dificultad de estas mazmorras no está condicionada por las variantes de Nuevo Juego+, solo por su profundidad y tipo, de modo que una Mazmorra Cáliz tendrá la misma dificultad tanto en la primera partida como en la segunda vuelta.
Jefes de las Mazmorras de Cáliz
Aunque las Mazmorras Raíz ofrecen jefes que pueden ser diferentes para cada usuario, existen una serie de jefes fijos para los Cálices "normales". A la inmensa mayoría de ellos ya los conocemos, pero existen unas cuantas variaciones que hay que tener en cuenta. Hay algún que otro monstruo que te puede dar problemas y ahora te detallaremos a todos los que debes ir derrotando hasta llegar al jefe final secreto del juego, Yharnam.
Recuerda que la dificultad de los jefes es la misma en cualquier partida, independientemente de que estés en NG, NG+ o cualquiera posterior.