Antes de nada, hay que aclarar que hay dos entradas a esta zona. Una es a través del Edificio Lectivo y la otra es desde la Segunda planta del Aula de Conferencias. La guía se basa en que juegas siguiendo la guía y por tanto, te guiaremos desde esta segunda entrada a la zona.
En esta zona debes tener cuidado con las zonas elevadas, laderas y cosas así, porque suele haber enemigos que te lanzan rocas que tiene la mala costumbre de matarte con un sólo impacto.
Bien, vayamos con la exploración de la zona: tu destino es muy obvio si miras hacia abajo nada más salir de la cueva, pero, obviamente, no podremos ir en línea recta. El camino a seguir lo encontrarás si te das la vuelta una vez fuera de la cueva y miras hacia abajo al avanzar un poco: verás un pantano evidentemente venenoso. Te tienes que ir descolgando hasta ahí, dejándote caer sobre los salientes hasta llegar abajo.
En caso de que no te resulte posible hacerlo porque no has mejorado a tu personaje, vas a tener que dar un rodeo bastante peligroso, pero la dirección a seguir es la misma. La diferencia es que habrá más enemigos, te harán más daño y morirás unas cuantas veces, con toda seguridad.
Cuando llegues al pantano, de una forma u otra, al darte la vuelta estarás mirando en la dirección del templo que viste al principio desde lo alto, en la salida de la cueva. Llegarás a otra cueva que debes atravesar. Al salir, avanza pegado al lado derecho y llegarás a otra abertura con un gigante en tu camino al que debes eliminar.
Muchísimo cuidado con el siguiente enemigo que verás por primera vez. Se trata de un tipo alto, con lo que parece un enorme cerebro a la vista. Nada más verte, verás cómo sube disparada la barra de Frenesí. Cuando esté al máximo, recibirás una inmensa cantidad de daño, que depende en gran medida de tu Lucidez. A más Lucidez, más daño recibirás. Esto es potencialmente letal, pero si te agarra, entonces ya sí que puedes despedirte de todo porque te va a matar hagas lo que hagas, con toda seguridad. Si no puede "verte", es decir, si hay un obstáculo en su línea de visión hacia ti, la barra no sube. Aprovecha esto para matarlos rápidamente.
Después de esto no te queda mucho para llegar al templo aquel que se veía y enfrentarte al jefe de esta zona, Amygdala. Al derrotarlo conseguirás el Cáliz del Afligido Loran.