Llegarás a la Tumba de los gigantes después de completar Las catacumbas, justo después de derrotar a Molinete.
Como recomendación para toda esta zona: si derrotaste a Havel, conseguiste el Diente de dragón y puedes usarlo, hazlo y empuña la maza a dos manos. La mayoría de enemigos están quietos hasta que te acercas mucho, y puedes usar el ataque fuerte para machacarlos antes de que se muevan, incluidos los esqueletos gigantes.
Avanza por el único camino posible, y verás unas luces en el suelo, que si no tienes nada que ilumine tu camino te marcarán el camino a seguir por un puente (ataúd, en realidad). Después habrá un esqueleto gigante, ten cuidado. Después de eliminarlo, ve a la izquierda y te podrás deslizar por otro ataúd. Gira a la derecha, mata a otro gigante, coge el Alma venerable caballero y vuelve a donde aterrizaste para bajar hasta donde encontrarás a Patches pero, antes de hablar con él, baja por la escalera a tu izquierda para llegar a una hoguera.
Vuelve a subir y (si está, que debería. Es muy complicado que no esté), habla con Patches, dile que no y acércate al borde. Verás una secuencia y habrás llegado al fondo del abismo sin matarte. No obstante, te encontrarás a Vince y Nico de Thorolund convertidos en hueco si no los mataste.
Entre esos tres objetos que tienes delante está la utilísima Calavera farol, que puedes usar como linterna y quitarte el Gusano de la cabeza si lo estás usando.
Avanza pegado a la pared izquierda con el acantilado detrás y verás a Reah si no la mataste. No hables con ella aún.
Sigue un poco más y te encontrarás con Vince y Nico, mata a ambos y habla con Reah. Te dará el milagro Reabastecimiento y se irá a la Parroquia de los no muertos, al altar de la iglesia.
Avanza por detrás de Reah, en línea recta, y verás una cuesta. En lo alto hay Titanita blanca, lo que hará aparecer dos esqueletos torre que tienes que matar. Ahora regresa junto a Reah y continúa pegado a la pared que tiene delante, sin separarte de ella.
Cruzarás un túnel bastante estrecho, con más torres al final, y una escalera. Golpea el muro que tienes delante al subir y ahora, al salir a la cornisa, ten cuidado: hay arqueros.
Si giras a tu izquierda en la cornisa llegarás a una plataforma con un agujero y unas escaleras. Mucho ojo porque abajo del todo hay tres esqueletos gigantes. Si estás usando el Diente de dragón, puedes esperar a que se junten bajo la escalera, tirarte sobre ellos y machacarlos.
Hay más esqueletos gigantes abajo, así que ten cuidado, aunque de entrada sólo irán tres a por ti, a los demás te tienes que acercar tú. Cuando la zona esté despejada, recoge el Alma valiente caballero y el Ascua div. gr. (Ascua divina grande) del fondo. Da la vuelta, sube la escalera y regresa a la cornisa.
Si te fijas, justo junto al agujero antes de bajar la escalera hay una cuesta hacia arriba, pero no subas aún. En su lugar, cruza la cornisa para volver a la hoguera y hablar con Patches. Perdónalo.
Ahora vuelve a la cornisa y sube por la cuesta que hemos ignorado, mata al esqueleto que hay subiendo, al arquero junto a la escalera, sube, déjate caer si quieres a la plataforma que has visto para coger otra Alma venerable caballero y, una vez arriba, mata a dos esqueletos gigantes. Sube por una escalera a la izquierda.
Desde aquí podrás subir la cuesta o dejarte caer hacia el objeto que ves y coger un par de almas. Cuando termines, regresa a donde estaba Patches. Debes continuar por el camino que queda tras él, a tu derecha, con muchísimo cuidado.
Avanza despacio con la luz levantada para ver un esqueleto gigante cuadrúpedo, al que, para abreviar, llamaremos perro esqueleto. Es un enemigo letal si consigue golpearte, así que tienes dos opciones: destrozarlo con el Diente de dragón (usa el ataque fuerte en cuanto lo tengas a tu alcance para aturdirlo y luego remátalo) o intentar rodearlo. Por suerte, tienes que estar muy cerca para llamar su atención, ya que parecen ser casi ciegos, ni siquiera puedes ver sus ojos en la oscuridad.
Sigue por el camino que hay pegado a la pared derecha y cruza el muro de niebla. Te disparará un arquero, pero no vayas corriendo a por él porque hay perros esqueleto en esta zona, es mejor comerte un par de flechas que llamar la atención de varios seres de estos.
Pegado a la pared de la derecha verás al primero cuando avances. Ten cuidado con el techo si estás usando el Diente de dragón. Ahora avanza hacia el arquero y, en cuanto lo veas, date la vuelta y vuelve hasta el primer perro esqueleto, pasando por el muro de niebla, date la vuelta y derrota al Caballero Negro que te habrá seguido hasta aquí. Ahora ya puedes matar al arquero y tomarte un respiro.
Junto al arquero hay un Alma valiente caballero. Por el otro lado de la plataforma hay un pequeño puente hacia otro perro esqueleto y una rampa que desciende. Verás que estás en una cueva con tres caminos.
Ve por la derecha, no habrá peligros y encontrarás el Escudo efigie. Luego ve por la izquierda, baja la siguiente cuesta y habrá un perro esqueleto y un esqueleto gigante. Cuando los mates, avanza pegado al muro izquierdo y llegarás a otra hoguera.
Te recomendamos encarecidamente que avances por esta zona como humano, porque serás invadido por un espectro rojo más adelante, al que debes derrotar para conseguir un equipo muy interesante.
Ahora viene un momento tenso. Sube hasta donde has matado al arquero (si has descansado en la hoguera, tendrás que volver a matarlos) y mira el cuerpo que está junto él, donde has cogido el alma antes. Pues bien, debes coger carrerilla y saltar en línea recta, hacia el costado derecho del cuerpo (o sea, en línea recta hacia el borde) y caerás en una plataforma. Aquí está el objeto que quizás hayas visto mientras estabas con el perro y el esqueleto gigante de antes de la hoguera.
Al acercarte aparecerán varias torres de esqueletos, pero al derrotarlas, podrás coger el Anillo serpiente plateada.
Hay que seguir descendiendo, mira hacia donde ves una abertura en la pared de roca y abajo verás una plataforma a la que dejarte caer.
Desde aquí, simplemente baja y desciende las escaleras, llegarás a una cornisa. Avanza hasta ver una cueva a tu derecha, no entres, quédate aquí y serás invadido (si eres Humano) por Leeroy el paladín. Si consigues acabar con él recibirás Humanidad x2, Grant, el escudo Sanctus y, más adelante (te indicaremos cómo) el Set de paladín. De momento, entra en la cueva.
Estás en una cornisa y debes mantener la calma, avanza e irán saliendo torres de esqueletos del suelo, mátalas mientras aparecen y cuando te acerques al arquero, vigila tu izquierda porque hay un esqueleto gigante.
Verás que en la siguiente zona, pasando la cueva, hay varios Molinete, versiones más débiles del jefe. Puedes matar varios desde aquí con el arco.
Baja y encontrarás, justo al terminar la cuesta y a la izquierda, un Alma héroe, otro Molinete y unos esqueletos enanos que causan tóxico. Ten en cuenta que el resto de Molinete de la zona te dispararán bolas de fuego y los esqueletos pequeños aparecerán ad infinitum.
Baja la cuesta, ve al fondo de la cueva, coge una Titanita blanca y sube rápidamente la rampa, estarás cerca del muro de niebla. Coge otra Alma héroe, rompe los tablones y cruza el muro.
Prepárate para tu combate con Nito, el Rey del Cementerio (cúrate nada más caer porque el guantazo será considerable).
Cuando lo derrotes, conseguirás el Trofeo Derrota a Nito. Antes de seguir, si derrotaste a Leeroy, en un hueco encontrarás el Set de paladín (Yelmo, Armadura, Guanteletes y Polainas de paladín). Ve al fondo y usa la hoguera para regresar al Santuario de Enlace del fuego.
