Localización
El Demonio de Tauro es un jefe opcional que encontrarás en el Burgo de los no muertos. Estará en lo alto de una torre de vigilancia circular, tras un muro de niebla. Cuando cruces el puente que une las dos torres de camino a la Parroquia de los no muertos se te echará encima. Cuidado porque puede matarte instantáneamente si te cae encima.
Puedes evitarlo si tienes la Llave Maestra, siguiendo por una de las otras rutas hacia la Parroquia de los no muertos, aunque, lógicamente, en tu primera partida te interesa matarlo para conseguir almas.
También aparece como minijefe en las Ruinas de los Demonios.
Estrategia para derrotarlo
Antes de nada, lo primero y más importante, tanto si el monstruo ya está ahí como si no: sube la escalera que queda a tu derecha nada más salir al puente. Podrás subir a lo alto de la torre y eliminar a dos arqueros que te estarían estorbando durante todo el combate.
- Si te colocas en el punto donde están los arqueros, puedes saltar sobre el demonio y apuñalarlo en la cabeza.
- Luchar contra él "limpiamente", intentando esquivar sus ataques, es bastante suicida, dado lo estrecho del lugar en el que tiene lugar el enfrentamiento.
- Si no quieres recurrir a simplemente saltar sobre él, colocarte entre sus piernas es una garantía de seguridad casi absoluta. Desde ahí podrás golpear sin miedo a que te den la inmensa mayoría de sus ataques.
- Si te colocas entre sus piernas, recuerda que intentará moverse para tenerte de nuevo a su alcance, así que no te quedes sin resistencia.
- El Demonio de Tauro es muy vulnerable al daño de Rayo.
Si te lo cruzas en las Ruinas de los Demonios es mejor que simplemente los evites. En estas circunstancias estás en desventaja por el daño constante de fuego que produce el suelo y la recompensa no compensa el riesgo.
Recompensas posibles
- Almas: 3.000 (NG), 15.000 (NG+).
- Arma: Gran hacha demonio (5% de probabilidad).
- Humanidad.