A medida que avances en Sekiro: Shadows Die Twice te encontrarás con una serie de enemigos especiales, de élite, minijefes, o como quieras llamarlos. Se trata de enfrentamientos especiales, en su amplia mayoría no obligatorios, que suponen un reto mayor que el de los enemigos normales, y por tanto tienen una serie de características concretas:
- Los minijefes tienen siempre o casi siempre dos barras de vida, así que hacen falta dos golpes mortales para acabar con ellos.
- Los minijefes no reaparecen al descansar en un Ídolo una vez los has eliminado.
- Todos los minijefes dejan caer una Cuenta de oración.
- En caso de que pases por alto un Minijefe y deje de estar disponible por motivos argumentales, los objetos que deje caer aparecerán en la Caja de ofrendas del Templo desolado.
- En muchos casos es posible sorprender al Minijefe y hacer un golpe sigiloso para quitarle una barra de vida.
- Si le has hecho daño y te alejas demasiado, el Minijefe recupera toda su vida.
- La mayoría de minijefes son vulnerbales bien al veneno de la Sabimaru, bien al fuego del Hacha o el Conducto llameante con Fuerza Viva.
Aunque cada minijefe es, técnicamente, un enemigo único, hay solamente un puñado de tipos y dentro de cada tipo, todos se comportan de la misma manera, con alguna excepción que llevará su apartado independiente.
Por tanto, vamos a enseñarte, antes de la ubicación de cada uno de ellos, cómo derrotar a cada tipo de minijefe.
Generales
Los Generales son un tipo de minijefe básico. Te encontrarás con ellos prácticamente desde el principio del juego y la verdad, si tienes problemas con ellos, estás en un serio aprieto.
- Líder Shigenori Yamauchi: un soldado de Ashina que controla la zona del Embalse.
- General Naomori Kawarada: recién recuperado, Sekiro se cruza con un general cerca del Templo.
- General Tenzen Yamauchi: otro enorme guerrero monta guardia cerca del Castillo Ashina.
- General Kuranosuke Matsumoto: un oficial alienta a las tropas antes de que el enemigo ataque el castillo.
Ogros encadenados
Los Ogros encadenados son unas malas bestias temibles. Por si sus patadas y manotazos no fueran suficientes, tienen la mala costumbre de agarrarte y matarte al instante.
- Ogro encadenado (Alrededores de Ashina): los soldados de los Ashina han conseguido atrapar a un monstruo.
- Ogro encadenado (Castillo Ashina): los Ashina han decidido dejar una bestia en la planta baja para intentar repeler el ataque.
Borrachos
El llamado Borracho es un tipo de enemigo gigantesco, armado con una espada curva con muchísimo alcance y que puede pegarse un lingotazo de veneno o líquido inflamable y escupirlo, tanto sobre ti como sobre su espada.
- Juzo el Borracho: uno de los bandidos que asaltó la Hacienda Hirata se quedó a montar guardia.
- Tokujiro el Glotón: en el bosque hay fantasmas, lobos y un gigante muy peligroso.
- Shigekichi de la Guardia Roja: el Ministerio del Interior tiene a su propio matón.
- Juzo el Borracho (Purificación): volveremos a vérnoslas con Juzo en un pasado más lejano.
Toros llameantes
Dos enormes toros embolados nos esperan en el mundo de Sekiro. Acabar con ambos es un tanto complicado, pero no te preocupes, para eso estamos nosotros.
- Toro llameante: alguien creyó que esta bestia sería una buena máquina de guerra.
- Toro cerezo del Manantial: en esta ocasión, el fuego tiene un tinte más sobrenatural.
Siete Lanzas de Ashina
La élite de los guerreros de Isshin Ashina, formaron parte de sus cuerpos especiales durante la última guerra. Aún quedan dos de las Siete Lanzas de Ashina por la zona, y no nos lo pondrán nada fácil.
- Siete Lanzas de Ashina - Shikibiki Toshikatsu Yamauchi: un soldado de élite protege la Torre de la Luna.
- Siete Lanzas de Ashina - Shume Masaji Oniwa: alguien ha traído refuerzos pesados para el enfrentamiento con el Ministerio.
Sombras Solitarias
Parte de la élite ninja, las Sombras Solitarias son rápidos y letales. También son capaces de usar distintas herramientas con las que ponerte en serios aprietos.
- Sombra Solitaria espada larga: un ninja busca a Sekiro para rematar el trabajo.
- Sombra Solitara vil: alguien ha mandado ninjas de élite para atacar el Castillo Ashina.
- Sombra Solitaria Masanaga el Lancero: un shinobi llora la muerte de su hermano en un acantilado.
- Sombra Solitaria Masanaga el Lancero (Purificación): Masanaga también tomó parte en el asalto a la Hacienda Hirata.
Élite de Ashina
Entrenados en un peligrosísimo estilo de combate basado en el iaijutsu, con brutales y veloces ataques de desenvainado rápido, los soldados de la Élite Ashina no son muy frecuentes, por suerte.
- Élite de Ashina - Jinsuke Saze: un guerrero mantiene la calma en el Dojo Ashina.
- Élite de Ashina - Ujinari Mizuo: un samurái toma una decisión por el bien de los Ashina.
Ciempiés patas largas
Los Ciempiés patas largas son un extraño tipo de habitantes de las montañas. No son ninjas, no son gurreros... son más bien cazadores un tanto raritos. Y muy grandes.
- Ciempiés patas largas Sen'un: hay un templo cercano a un Apestado en el que parece haber una reunión de miembros de los Ciempiés.
- Ciempiés patas largas Jirafa: una aberración se interpone en nuestro camino.
Ojos de la serpiente
Los Ojos de la serpiente son unos bandidos especialmente grandes, especialmente feos, especialmente violentos y especialmente molestos.
- Shirafui Ojos de la serpiente: en medio de los acantilados, alguien hace guardia contra los intrusos.
- Shirahagi Ojos de la serpiente: un segundo líder bandido protege las Profundidades de Ashina.
Enemigos únicos
Existen una serie de minijefes que son completamente únicos. No son jefes, pero tampoco te pondrán las cosas nada fáciles.
- Guerrero con armadura: un tipo venido de muy lejos busca algo muy concreto.
- Cazador shinobi Einshin de Misen: el asalto a la Hacienda Hirata contó con todo tipo de guerreros, por lo visto.
- O'Rin del Agua: el sonido del shamishen que se escuchaba en el Embalse Ashina venía de muy lejos...
- Líder Okami Shizu: en este caso en concreto, no te hacen falta explicaciones de cómo derrotar al enemigo, sino de cómo se llega hasta él. Simplemente debes avanzar por el Palacio del manantial. Tienes que llegar hasta el Ídolo Gran cerezo (en las terrazas, delante precisamente del arbol). Desde ahí podrás llegar a las ramas y matar a este puñetero enemigo, el encargado de lanzarte rayos desde que has llegado al lago. No te preocupes, no ofrece ninguna resistencia.