Localización
Encontraremos a Molinete como jefe al final de Las catacumbas. Tendrás que derrotarlo para poder acceder a la Tumba de los gigantes, así que se trata de un enemigo completamente obligatorio... para tu desgracia. Se trata de un jefe que posiblemente resulte un tanto irritante durante tu primer encuentro, aunque en partidas posteriores puedes acabar con él antes de que se convierta en una amenaza.
Estrategia para derrotarlo
Debes saber que tu prioridad es eliminarlo rápidamente.
A diferencia de lo que sucede con otros jefes, te interesa que sea un combate corto, aún con el riesgo que supone ser extremadamente agresivo.
- En sí mismo, Molinete no es peligroso, el problema es que tiene la mala costumbre de crear clones de sí mismo. Si te supera demasiado en número es cuando puede ser un incordio y matarte.
- Sus ataques de fuego estilo lanzallamas son bastante dañinos, pero tremendamente fáciles de esquivar. Además, quedará vendido para llevarse un par de guantazos.
- Molinete se teletransporta, lo que puede hacerlo algo más complicado de alcanzar que otros enemigos.
- No tiene demasiada vida, y con una buena serie de golpes puedes derrotarlo rápidamente.
- Más adelante aparece como enemigo normal en la Tumba de los gigantes.
Posibles recompensas
- Rito del avivado (sólo como jefe).
- Máscara del niño.
- Máscara del padre.
- Máscara de la madre.