Como en muchos otros casos, podemos llegar a la Ciudad infestada desde múltiples caminos. En este caso en concreto, podemos llegar bien desde Profundidades (después de derrotar al Dragón boquiabierto podrás abrir la puerta que estaba cerrada en el túnel donde está el mercader, justo en la única sala por la que puede salir de la zona del jefe), o bien como en el caso que nosotros explicaremos, desde el Valle de dragones.
La Ciudad infestada es una zona repugnante y en la que TODO ES VENENOSO. Procura llevar equipo resistente a este estado alterado, Musgos morados y demás, todo lo que puedas para sobreponerte a este estado alterado.
Partiendo desde el acceso del Valle de los dragones, como indicamos, avanza con cuidado porque hay dos enemigos gigantes armados con porras. Sus ataques causan veneno (te lo advertimos) pero, siempre que tengas el escudo levantado y no dejes que te ataquen mucho, son lentos y puedes apuñalarlos por la espalda.
Te encontrarás con otro más mientras avanzas, sigue el mismo sistema: agujeros de velocidad en la espalda. Cuando llegues a los tablones, aparecerá el cartel de que has llegado a este lugar. Al fondo verás un cofre que contiene la Llave ruinas Nuevo Londo. Esto será muy importante después.
Mantén tu escudo levantado mientras exploras. Esto es porque hay unos enemigos con cerbatanas que te envenenarán con mirarte y tienen buena puntería. Mejor no ponérselo fácil.
Baja dos tramos de escaleras y mata a los mosquitos y esa araña-demonio que obviamente, son venenosos. Baja otras escaleras y mata al mosquito, saca el arco y mata al hueco de la cerbatana a tu izquierda. Una amenaza menos. Avanza por el puente y ten cuidado con el siguiente tramo de escaleras, abajo hay una araña.
Da la vuelta por los tablones y usa unas ramas para pasar sobre la rueda de agua, mata a la araña (no subas las escaleras) y ve al fondo para recoger el Set del sellador (Máscara del sellador, Túnica, Guantes y Cinto Escarlata), además del Catalizador de latón. El cofre de al lado contiene el hechizo Remedio.
Ahora regresa por donde has venido, viene una parte peligrosa. Cruza de nuevo la rama, para ponerte junto a una de las ruedas de agua, y fíjate en que hay unas plataformas en la rueda. La idea es que te dejes caer sobre una de ellas para descender aún más.
Se trata de un salto que puede parecer complicado, pero básicamente consiste en correr hacia adelante y resistir la tentación de saltar. Te harás daño, pero no te matarás (salvo que falles. Entonces te matarás un poquito).
Una vez estés abajo, fíjate en las antorchas que deberías tener cerca, porque serán una buena referencia para moverte por aquí. Empieza por correr (a toda pastilla, si estás en el agua, sufrirás veneno) hasta ellas, matar a la araña y párate un momento. En cuanto te muevas un poco serás invadido por Mildred la devoradora de hombres (si eres Humano). Derrótala, te será útil muy pronto.
De sus restos puedes recoger el Cuchillo de carnicero. Ahora vuelve a mirar a tu alrededor: si has seguido nuestra guía, verás a Shiva del este muy cerca de las antorchas, aquí te venderá objetos.
Habla con él y selecciona Aprender gesto para conseguir el Gesto mirar al cielo. Aunque el camino para seguir con la historia está a través de la ciénaga, queremos indicarte cómo conseguir una cosilla. Corre al islote que tienes al lado, la columna más cercana que hay. Hay una araña y un Alma venerable caballero. Desde aquí, llegarás al islote de donde salió Mildred. Fíjate que en un lado ves una especie de "colina con pinchos". Pues bien, sigue la orilla de la pared hasta doblar la esquina.
A la vuelta de la esquina hay dos gigantes lanzarrocas, pero no deberían preocuparte: son lentos y torpes. Salvo que te quedes quito como un tonto, no te darán, acaba con los dos. Ve detrás de donde estaban y verás, en un recoveco, el Gran garrote.
Date la vuelta por donde has venido y, con la "colina de pinchos" a tu espalda, avanza pegado a la orilla derecha de la zona, para evitar pisar el pantano venenoso.
Aparte de unos cuantos insectos, verás un cadáver con un Gran alma venerable caballero. Desde aquí, con girar un poco la cámara, verás una cuesta con varias rampas de madera, antorchas y un montón de arañas demoníacas. No tiene pérdida. Sí, vamos a subir por ese lugar tan apetecible.
Sube la rampa y en cuanto puedas, gira rápidamente (hay un enemigo con una cerbatana sobre ti) a la izquierda, hasta el final, y sube las escaleras. Después de matar a dos arañas, podrás ver algo brillar en la parte del fondo de estos tablones: el Set de vagabundo (Capucha, Abrigo, Guante largo y botas de vagabundo), además de un Bracamarte.
Vuelve a bajar a la orilla del pantano y dirígete hacia Shiva, pero esta vez avanza por la orilla del lado en el que estás, en lugar de por el otro, por el que viniste la primera vez. No tardarás en encontrar un hueco en el que, milagro, hay una hoguera.
Ve al fondo del pasillo desde la hoguera y abre el cofre para encontrar una Escama dragón y sigue con tu camino para volver junto a Shiva. Sigue avanzando por esta orilla y rápidamente verás un objeto que te indica otro islote, una Titanita grande. Desde aquí, tu mejor opción si tienes al menos un Musgo morado es correr hacia la colina de pinchos, subir tan velozmente como puedas y meterte en la cueva, cúrate el veneno y usa un Frasco de Estus.
Al bajar por la cueva, terminarás con esta zona repugnante y habrás llegado a los Dominios de Quelaag, una zona bastante más fácil (y corta)