Mientras avanzas usando el Rayo reflector en Librarium Machinae, nos tocará luchar contra La Exangüe, un jefe extremadamente peligroso.
Ataques
- Salpicón de sangre: un movimiento muy rápido. Oirás cómo dice "Scarlet thrust" y te lanzará un pegote de sangre con bastante velocidad y buen seguimiento. Si eres capaz de saltar a su espalda, no puede alcanzarte. En la segunda fase, el salpicón es mucho más fuerte y cubre más distancia.
- Chorro de sangre: cuando veas que coloca el paraguas como para hacer una estocada y se infla, va a lanzar un chorro de sangre constante, ondulado, que te golpeará sí o sí si estás frente a ella. Luego el chorro se mueve y puedes quedarte agachado para esquivarlo. Si consigues saltar sobre ella y ponerte a su espalda, nunca podrá alcanzarte, ni siquiera en la segunda fase.
- Golpe con el paraguas: un simple golpe con el paraguas si te acercas demasiado.
- Paraguas voladores: hará aparecer paraguas que sobrevuelan la zona y estorban bastante, puedes apartarlos a golpes.
- Lluvia de sangre: durante la segunda fase, cuando la sangre caiga del techo, te hará muchísimo daño. Busca una zona sin manchas de sangre en el techo.
- Torbellinos de sangre: cuando veas que bajo tus pies aparece un pequeño torbellino de sangre, corre a la zona central. Va a hacer aparecer dos enormes torbellinos de sangre a izquierda y derecha que harán que la única zona segura sea la central, o los extremos laterales de la sala. Los torbellinos desaparecen pasados unos segundos.
Estrategia
Durante todo el combate tienes que buscar su espalda. Sus ataques la dejan vendida durante unos segundos, pero aún así, debes tener presente que en comparación al resto hasta el momento, es el jefe más difícl al que te has enfrentado. Los ataques son rápidos por muy predecibles que puedan ser, y si te equivocas, te dará de lleno.
Golpea cuando veas que usa la sangre del techo y las paredes para curarse. Sabrás el daño que llevas hecho en función del vestido: cuanto más roto esté, más daño has hecho. Por lo demás... bueno, es un combate muy largo y muy difícil. No te avergüences si tienes que volver más tarde a por ella.