A lo largo de la historia y misiones principales de Final Fantasy XVI te verás las caras con docenas de jefes finales o bosses que te esperan en cada capítulo. En esta sección te explicaremos cómo derrotar a Artemalia, un jefe al que te enfrentarás durante Dioses y hombres.
Artemalia: ataques y cómo derrotarlo
Artemalia es el jefe final del juego.
Como tal, cuenta con una buena cantidad de ataques, muchos de ellos ya los conoces y otros son exclusivos de este combate en esta versión de Artema.
- Fulgur jaculum: creará zonas de daño por toda la plataforma. Ojo, porque no estallarán de inmediato, normalmente embestirá obligándote a evitar el impacto pero, al mismo tiempo, debes procurar no caer en las zonas de daño.
- Embestida: un potente ataque de embestida, similar al de decenas de jefes antes que él. El problema viene dado si lo usa con el Fulgur jaculum activo, ya que tendrás poco margen de maniobra.
- Combollama: echará el brazo derecho hacia atrás durante un instante, lanzará un golpe directo de corto alcance y seguirá con otros dos golpes, uno con la derecha y otro con la izquierda. No lo usará con frecuencia, es fácil de evitar, bloquear y castigar.
- Hexarrayo: creará una zona de daño a su alredeor, y seis pequeñas zonas de daño circulares más alrededor de la central. Debes evitar estar en cualquiera de ellas cuando caigan los rayos.
- Impactrueno: desaparecerá y verás una zona de rayo en el suelo, bajo tu posición. Debes salir de ella, Artema se estampará contra el suelo provocando algo de daño de área, pero sin ondas ni nada.
- Cataclismo: lanzará un potente puñetazo contra el suelo. El puñetazo hace daño, pero además generará tres anillos de daño, uno tras otro. Si el primero te impacta te lanzará irremediablemente contra el segundo y éste contra el tercero. O sales corriendo de las zonas de daño, o haces una esquiva perfecta hacia Artemalia para evitar el ataque por completo y castigar en la recuperación.
- Euroaquilón: caerá una cascada de garrazos de Garuda desde el cielo. Cuando terminen, un instante después, caerá un último ataque de garra descedente con mayor radio de efecto que los pequeños en cascada. Una esquiva perfecta nada más empezar es factible, pero si fallas te comerás el combo casi de lleno.
- Garra divina: te agarra y atrae hasta tu posición para hacerte daño.
Una vez le hagas suficiente daño, verás una secuencia y tendrás que superar tres Contraataques certeros. Después contará con nuevos ataques:
- Exafulgor: un rayo sostenido que se mueve de lado. Fácil de esquivar.
- Rapsodia boreal: zonas de daño sobre las que caerán estacas de hielo.
- Escisión: es el mismo ataque de líneas de daño que utilizaba Barnabás. Si te pegas a Artemalia podrás darle una buena paliza, el ataque no hace daño, son las líneas de daño lo que debes evitar.
Tras otra buena tanda de daño, habrá que superar otros tres Contraataques certeros y pasar a una nueva fase con nuevos ataques.
- Rasgadura múltiple: aparecerán varias zonas de daño en el suelo, estallarán segundos después.
- Látigo de energía: se levantará un instante, echará un brazo atrás y verás que sale una luz del mismo. Lanzará un combo de dos golpes bastante lento, de corto alcance y muy potente. Por suerte, el alcance es mucho menor de lo que parece y se esquiva con relativa facilidad.
- Sanctus: aparecerá una enorme zona de daño de la que, justo antes de estallar, saldrán varias zonas de daño en línea recta. Debes estar tanto fuera de la circular como de las rectas para no sufrir daño.
- Círculo de energía: te rodeará bastante rápido al tiempo que lanza proyectiles de energía. Es más fácil de evitar de lo que parece y se puede neutralizar con Onda térmica, por supuesto.
- Redención: se teletransportará a tu lado y lanzará un potente chorro de energía.
- Pirólisis: un potente ataque de área cercana de fuego. Si consigue golpearte, lleva a cabo un combo bastnte dañino.
- Meteo: un ataque que ya conoces. Caerán proyectiles y crearán unas zonas de daño que se expandirán ligeramente, pero no creando grandes ondas expansivas ni nada por el estilo. Con alejarte de cada zona de impacto deberías poder esquivar el ataque con relativa facilidad.
- Aequat omnis cinis: unos palabros muy chulos para decir una andanada de proyectiles dirigidos y un estampido contra el suelo con daño de área corta. Onda térmica y a correr.
- Embestida y represalias: ahora su ataque de embestida deja una zona de daño a su paso, que estalla un segundo después de que haya hecho la pasada.
- Llamas de la creación: su ataque definitivo. Cuando lo veas, corre de lado para salir tanto de la zona de impacto como del daño de área que vendrá después, una zona mayor que la del impacto original.
- Fulgor: en cuanto veas el letrero del ataque, aléjate a izquierda o derecha tan rápido como puedas. Aparecerán varias esferas que se moverán en espiral hacia el centro del punto de invocación. Al chocar provocan una explosión que cubre la zona de la espiral.
- Torrente de proyectiles: aparecerán varios miniportales en columna sobre su cabeza y caerá una lluvia de bolas de luz con cierto seguimiento. Puedes devolver el golpe con Onda térmica.
Una vez consumas lo suficiente su barra de vida, tendrá lugar una secuencia final con un Contraataque certero. Después de eso, Artemalia queda en estado crítico. Aún puede lanzar ataques, pero se agota tras cada uno. Sigue golpeando hasta agotar del todo su barra de vida y supera un último Contraataque certero para acabar con Artemalia y ver el final del juego.
Recuerda que éste no es más que uno de los muchos enemigos a los que te enfrentarás en Final Fantasy XVI. Si tienes problemas para acabar con él, es posible que te venga bien cambiar de arma o usar alguna habilidad adicional.