A lo largo de la historia y misiones principales de Final Fantasy XVI te verás las caras con docenas de jefes finales o bosses que te esperan en cada capítulo. En esta sección te explicaremos cómo derrotar al Dragón blanco, un jefe al que te enfrentarás durante Cielo de lamentos.
Dragón blanco: ataques y cómo derrotarlo
El Dragón blanco usará una gran cantidad de ataques a distancia, así como unos cuantos golpes del Dragón akásico.
Te recomendamos llevar la Onda térmica para los proyectiles y la Ráfaga telúrica de Titán para contraatacar los golpes físicos.
- Cabezazo: cuando estés muy cerca, el dragón moverá la cabeza a un lado para luego atacarte moviéndola en arco hacia el otro. Contrarréstalo con Ráfaga telúrica.
- Golpe de ala: cuando estés a media distancia, verás que levanta un ala para acto seguido golpear con ella a lo largo, tratando de aplastarte. Si te mueves de lado no te dará, pero es fácil de esquivar de manera perfecta o bloquear con Ráfaga telúrica.
- Barrido de ala: este ataque poco menos que se avisa con un correo certificado. El dragón, a corta distancia, agitará un ala, la echará hacia atrás y luego hará un ataque de barrido. El ataque es rápido, pero tarda tanto en prepararlo que es imposible no identificarlo.
- Estampar el suelo: si se levanta pero no mueve las alas, va a estamparse contra el suelo. Se bloquea igual que cualquier otro ataque físico.
- Espiral aérea: cuando salte al aire y se eche un poco hacia atrás, cargará contra ti con un ataque de espiral. Es un poco más lento de lo normal y puede costarte cogerle el timing para esquivarlo de manera perfecta.
- Proyectiles de hielo: el dragón escupirá tres o cuatro proyectiles de hielo en varias direcciones. Nada preocupante.
- Ráfaga láser: si el dragón usa los Proyectiles de hielo desde el suelo, abrirá las alas y lanzará una andanada láser con seguimiento. Contraatacar con Onda térmica es la mejor opción.
- Hueste celestial: invocará unas esferas frente a él que se moverán muy despacio, pero harán bastante daño si te tocan. Siempre lo sigue una Ráfaga láser.
Después del primer Vulnerable sumará nuevos ataques.
- Emanación: aparecerán varios cristales que lanzarán rayos láser que se van moviendo. Debes saltar por encima de ellos o hacerles una esquiva perfecta. Cuando paren, los cristales se congregarán sobre tu posición y crearán una zona de daño, sal de ella antes de que estalle.
- Estrella polar: dos esferas caerán sobre ti (sin hacer daño) y dejarán una marca en forma de asterisco en el suelo. Las líneas son zonas de daño explosivas, sal de la zona o colócate entre las líneas.
- Suelo helado: estando muy cerca, lanzará un aliento gélido contra el suelo, que es una zona de daño. Salta o sal de la zona para evitarlo.
Tras hacerle suficiente daño usará nuevos ataques:
- Danza dragontina: invocará los rayos láser de Emanación, una fila completa de Hueste celestial y al mismo tiempo, lanzará una Andanada láser. Justo después caerán dos Estrellas polares y, nada más estallar, cargará contra ti con una Espiral aérea. Esquiva todo y bloquea el último ataque con Ráfaga telúrica.
- Sanctus cristalino: en esencia, es lo mismo que Danza dragontina pero con menos ataques.
Recuerda que éste no es más que uno de los muchos enemigos a los que te enfrentarás en Final Fantasy XVI. Si tienes problemas para acabar con él, es posible que te venga bien cambiar de arma o usar alguna habilidad adicional.