El Gigantus es uno de los jefes obligatorios a los que tendrás que derrotar para avanzar en la historia de Dragon's Dogma 2. En este caso, es un jefe que aparecerá durante El gigantus guardián, y técnicamente puedes ignorarlo, aunque perderías recompensas interesantes al hacerlo.
Ten presente que hay dos maneras de matarlo, la que tienes directamente bajo estas líneas y más abajo explicamos la forma rápida, relacionada con un logro/trofeo pero que te impide conseguir las recompensas especiales.
Cómo derrotar al Gigantus
Antes de nada, puedes matarlo al instante y, de hecho, esto te da un logro/trofeo por hacerlo. Para conseguirlo necesitas una Flecha de la ruina y que tu Arisen sea Arquero o Adalid con un arco, o bien una cabeza de medusa (marchita o de mejor categoría, si no puede petrificar no nos vale). Te recomendamos la segunda opción, ya que las cabezas de medusa pueden volver a conseguirse fácilmente.
Con ella en tu poder, simplemente debes esperar a que el Gigantus pase junto a tierra y usar la cabeza como una linterna para petrificarlo al instante. Tardará unos minutos en caer, pero hasta aquí llegará su viaje.
Sin embargo, esto hará que pierdas recompensas en forma de Lascas del despertar que caerán de los puntos débiles del bicho, esas estacas que salen de su cuerpo. Es posible golpearlos fácilmente con el Arquero mágico, aunque también puedes trepar por su cuerpo como con cualquier otro enemigo.
Si optas por esta opción, es mejor que esperes a que llegue a tierra, para que las estacas no caigan al mar. Una vez ahí, simplemente ve fijando objetivos y aprovecha las pendientes y zonas elevadas para ir apuntando mejor, o trepa. Siempre que te des un mínimo de prisa, el gigantus no llegará al campamento y no deberían perder la vida NPCs importantes.