Kratos ha conseguido una nueva arma durante La forja del destino, pero aún no puede darle uso. La Historia de God of War: Ragnarok nos vuelve a poner en el papel de Atreus, que tiene como objetivo recuperar la última parte de la máscara, lo lleva al joven semidiós a Helheim, el reino de los muet-tos.
Durante un rato, no tienes más que avanzar por el único camino posible. Cuando llegues a una puerta cerrada, simplemente debes usar la manivela de su izquierda.
Continúa hasta que llegues a un callejón sin salida y Thrúd te diga que saques la máscara. Aquí el juego se buguea un poco. Por mucho que saques la máscara y apuntes a la reja, puede que Thrúd ya no te diga nada, o puede que te diga que tenéis que dar un rodeo. Aunque no lo diga, retrocede y te atacarán unos enemigos. Cuando acabes con ellos, empuja la caja que la aesir indicará.
Bueno vale, eres un pringao y la pelirroja te da mil vueltas. Venga, cruza. Nada más subir, ve hacia la izquierda para encontrar el cofre legendario #1 de Helheim.
Ve hasta el otro lado y verás una gran reja con una piedra sónica a cada lado. Rompe la de la derecha, y el mecanismo que hay detrás. Esto hará caer una caja, vuelve a bajar por donde subiste y ve hacia el fondo para trepar por ella. Habrá varios infernales y una aparición bloqueando el camino arriba. Acaba con ellos y saca la máscara, enfocándola a la reja que tienes delante. No podrás pasar, pero justo a la derecha, en el suelo, hay una piedra sónica que debes romper.
Déjate caer y abre el cofre rojo. Sigue adelante hasta subir unas escaleras y, ahora sí, saca la máscara y apunta a la puerta.
Interactúa con la puerta para ver cuál es el sexo débil. Dispara a través de la abertura al cierre que hay en la parte de arriba y ve tras Thrúd. Cuando llegues abajo, gira siempre hacia la derecha hasta llegar a una especie de almacén con un agujero en el techo. Es la caja que has hecho caer, sube por ahí y elimina a los enemigos. La puerta se abre con una manivela a su izquierda, como la de hace un rato.
Continúa por la pasarela y, al llegar a la siguiente reja, date la vuelta. Hay otra piedra sónica en el suelo que debes destruir para descender.
Cuando llegues al final del camino, usa la máscara para enfocarla a la caja que bloquea el camino. Atreus debería decir que parece que es por aquí, y tu compañera moverá la caja para que avances. Retrocede para mirar la caja desde un lado y romper el cierre que la sujeta antes de continuar por el camino despejado. En esa sala hay una piedra sónica en el techo, rómpela, sube y avanza.
Sigue hasta ver un cofre rojo y luego trata de abrir la puerta. Esta vez el mecanismo está a la derecha de la puerta, no mires por la rendija.
Después de eliminar a más enemigos, saca la máscara y apunta a la reja. Thrúd no tardará en mover una caja, lo que te permite trepar por la pared. Baja por la cadena, avanza y es imposible que no veas el cofre legendario #2 de Helheim. Contiene la invocación rúnica Ira del lobo.
Desde el cofre, mira a la izquierda y tira la caja rompiendo el enganche. Regresa con Thrúd después de despachar a un par de espectros y avanza. No vamos a estropearte la siguiente sorpresa, sabrás lo que tienes que hacer cuando llegue el momento. Con el camino despejado, avanza hasta el acantilado y saca la máscara para ver... eh... joder, puñetero inútil.
Vienen una serie de secuencias donde simplemente avanzarás. Cuando todas acaben, elimina enemigos, vuelve a Casa de Sindri y quita de en medio las amenazas para ver más secuencias y pasar a Reencuentro.