God of War

Una secuela de los God of War hasta la fecha

God of War es una especie de reboot de la serie, pero también una secuela de los títulos lanzados anteriormente. Kratos ha abandonado la mitología griega y se refugia en la mitología nórdica, ha empezado una nueva vida y ahora tiene un hijo. Este hijo por el momento no tiene la capacidad de combate del general espartano, y Kratos tendrá que enseñarle las artes de combate mientras intenta dominar la rabia interior que le ha acompañado toda la vida.

La mitología nórdica, el nuevo hogar de Kratos

La nueva ambientación permite nuevos escenarios y nuevos enemigos. Los monstruos de la mitología griega a los que tantas veces nos enfrentamos, y los dioses a los que Kratos retó, se sustituyen esta vez por los Thor, Loki, Odín y compañía, y por los seres que pueblan las historias nórdicas y germánicas.

Un estilo de juego diferente a los originales

El reboot de la serie no es en la historia sino en la jugabilidad. El sistema "hack and slash" de todos los títulos hasta la fecha evoluciona en esta ocasión. Esta vez no habrá modo multijugador como en God of War Ascension, y el juego añade un sistema de evolución con puntos de experiencia que nos hará ir mejorando nuestras habilidades. También contamos con una habilidad de Rabia Espartana que usar durante un tiempo, un sistema de crafting, y la cámara pasa a estar sobre el hombro del protagonista.

Controlando a padre e hijo

Kratos ya no cuenta con sus míticas hojas encadenadas, sino que por lo visto usa un hacha mágica que puede tener habilidades elementales. En la aventura controlaremos principalmente al ahora barbudo dios, pero en todo momento estaremos acompañados por su hijo, al que también tendremos que controlar. Tenemos un botón para controlar al hijo, que hará una acción que dependa del contexto, como por ejemplo disparar una flecha con su arco.