La conferencia de Sony en este E3 fue una de las mejores que se recuerdan en los últimos años, y uno de los motivos fue por empezar por todo lo alto, con una orquesta tocando en directo la genial banda sonora del nuevo God of War, que se mostró por primera vez al mundo con una demo visualmente espectacular, y conceptualmente muy sorprendente.
Los usuarios de PS4 pedían a gritos casi desde el lanzamiento de la consola el regreso de God of War, y Sony no había hecho oídos sordos a esta petición, ya que esta nueva entrega se lleva gestando desde hace unos tres años. Tras God of War: Ascension en 2013, un buen juego que dejó un regusto amargo al no estar a la altura de las tres entregas anteriores, la saga tenía que volver con fuerzas renovadas. Y el máximo responsable de esta tarea es Cory Barlog, el director del nuevo God of War, que dejó Santa Monica Studio en 2012, para volver tan solo un año después, en 2013, momento en el que se inició el desarrollo de esta nueva entrega.
Que tocaba un cambio de ambientación era casi un secreto a voces, y que la mitología nórdica era una de las más apropiadas para un God of War a nadie se le escapaba, filtraciones y rumores aparte. Pero lo que más nos ha sorprendido de este nuevo juego de la saga es que no es un reinicio, es una reimaginación, aunque argumentalmente es una continuación, y vuelve a estar protagonizado por Kratos, con una historia que se sitúa un número de años indeterminado después de God of War III.

La mitología elegida va a dar mucho juego, con dioses como Odín, Thor, Tyr, Heimdall o Loki, y criaturas como los gigantes o jotuns, valquirias, elfos y enanos, y por supuesto todo tipo de bestias como Fenrir, un lobo gigante, Jörmungandr una serpiente gigante, los cuervos de Odín, y por supuesto dragones, que ya se han dejado ver al final de este primer tráiler.
Hoy en el E3 hemos podido asistir a una presentación del juego a cargo de Cory Barlog, y este nos ha confesado que se barajaron varias mitologías para esta entrega, entre ellas la egipcia, aunque finalmente se decantaron por la nórdica, porque creen que es la más apropiada para un God of War. Barlog nos ha vuelto a mostrar la demo que se enseñó hace unas horas en la conferencia de Sony, pero jugada de otra manera, y demostrándonos que hay cierta exploración en los escenarios, y que no es un juego totalmente lineal como pudo parecer en el primer tráiler. Nos dejó claro que tampoco será un juego de mundo abierto, pero que si habrá escenarios bastante amplios que incitarán a ser explorados, obteniendo diferentes tipos de recompensas.
Lo primero que llama la atención de este God of War es la situación de la cámara, detrás de la espalda de Kratos y bastante cercana, algo que cambiará el juego completamente. En lugar de las tradicionales cámaras fijas de la serie, que ofrecían perspectivas muy espectaculares y prácticas para un hack and slash, ahora tenemos una cámara que te acerca mucho a Kratos, y que podemos mover con el stick derecho, para observar unos escenarios repletos de detalles, que esconden secretos que tenemos que buscar con atención mirando el entorno.

Esta nueva cámara ofrecerá nuevas oportunidades jugables, y también narrativas, y nos es fruto de un capricho, ya que nos ha dicho Barlog que han experimentado con ella muchísimo hasta dar con el punto exacto, algo que también influye decididamente en el sistema de combate. Como pudisteis ver en esta primera demostración, ahora los combates son menos frenéticos, pero más contundentes, con una mayor sensación de peso en los movimientos de Kratos y sus golpes, más realistas. Por cierto, se han eliminado los tradicionales quick time events de la saga, algo muy obsoleto a estas alturas, aunque permanecen las ejecuciones de los enemigos y esas animaciones tan espectaculares y violentas de la saga.
Todos los cambios y novedades de esta entrega están conectados, y podremos estar más o menos de acuerdo con su nueva propuesta, pero hay que reconocer que el juego tiene un planteamiento detrás muy sólido, que se lleva gestando desde hace mucho tiempo. Por ejemplo, que el combate sea más realista, más lento y pesado, tiene relación con el nuevo Kratos, más humano que nunca, que luchará constantemente contra sí mismo por reprimir su rabia del pasado, como si de Jekyll y Mr Hyde se tratara.