Ahora o nunca es la vigésima primera misión de la historia de Dying Light 2. Comenzará al final de Asesinato. El juego nos advertirá de que estamos en el punto de no retorno, aunque debes saber que podrás seguir jugando tras terminar la historia. Simplemente, te dejarán sin libertad durante un rato. Al tajo.
No te enfrentes a los monstruos, ya que hay coléricos entre ellos, simplemente huye.
La cosa se calmará cuando des con una zona de luz ultravioleta.
Después de eso, acaba con unos cuantos renegados y abre el hueco del ascensor para descender. Sigue matando renegados hasta llegar al camión que te llevará a la fortaleza.
Cuando llegues a la puerta, si has seguido la guía, no te andes con tonterías: masacra al campamento entero. Cruza el puente sobre el agua para entrar al edificio grande del fondo y llegarás a una especie de comedor. En esta sala hay dos recuerdos, La orden de asesinato y la Carta de infectado -as de tréboles- Aullador.
Para avanzar, abre la trampilla del suelo, entre ambas mesas. Caerás al agua, nada hacia la entrada y podrás subir, abrir una puerta y ver una secuencia. Dile que Juan dijo que el Coronel no debe morir. Sube al conducto de ventilación y cruza hasta la siguiente puerta. Debes confiar en él, en lugar de apoyar a tu amiga. El marcador te llevará a un ascensor, ve a la planta baja.
Cuando llegues al laboratorio de Waltz, abre la puerta derecha para entrar en su habitación. Aquí encontrarás las cintas Grabación de la habitaciónd de Waltz #1 y Grabación de la habitaciónd de Waltz #2.
Vuelve a la sala anterior y examina la camilla. AL fondo, donde están los ordenadores, encontrarás la Grabación de la habitaciónd de Waltz #3 y ve al marcador para completar esta misión y pasar a X13.