Un nuevo debate entre Amita y Sabal. Hay unas plantaciones de té en la región que esconden opio, y cada uno de los líderes tiene unos planes con esa granja. Amita quiere eliminar a los soldados de Pagan Min y quedarse el negocio, para así tener un motor en la economía. Por otra parte, Sabal no cree que ese sea el deber de la Senda Dorada, y propone quemar la plantación. En tus manos queda qué hacer.
Hay varias zonas sembradas que aparecerán marcadas en el radar. Junto a ellas encontrarás una máquina que controla los aspersores.
Más o menos en el centro del terreno verás una gran casa, hay dos alarmas que deberías inutilizar para que no aparezcan más refuerzos, y es que se puede complicar mucho si entras a saco, porque hay varios perros y en el caserón se encuentra un mortero, que probablemente ya conozcas de algún puesto de control.
Si dices el plan de Amita, el objetivo es eliminar a los guardias y proteger las plantas del fuego. Lo mejor es ir en sigilo, porque no pondrías en peligro a las plantas. En el momento en que te detecten, empezará a funcionar el mortero y eso provocará incendios que tienes que apagar con los aspersores lo más rápido que puedas. Tras acabar con los enemigos, aparecerá una oleada de nuevos soldados, algunos equipados con cócteles molotov y armaduras, así que debes encontrar un equilibrio entre disparar y evitar el fuego.
El plan de Sabal nos parece un poco más fácil, porque es justo lo contrario: quemar las plantaciones y acabar con el ejército de Pagan Min. Si vas por las buenas, la táctica es disparar a las máquinas que controlan los aspersores para que el fuego no pueda ser extinguido e iniciar el incendio, por ejemplo con el lanzallamas, o dejar que el mortero haga su trabajo en cuanto seas detectado –no obstante, tendrás que tener cuidado y guiar los disparos a cada plantación-.
Nuestra recomendación para la misión de Sabal es tomar control del mortero, para lo que hay que entrar en la mansión y salir por uno de sus balcones. Desde esta posición puedes lanzar el fuego sobre las parcelas y matar a los enemigos sin problemas, e incluso explosionar los aspersores. El fuego hará su trabajo en pocos minutos.