Las raíces de la locura es la undécima misión de las Islas Temblorosas, el DLC incluido en The Elder Scrolls IV: Oblivion Remastered. Esta misión comenzará al terminar Símbolos de rango. Tras forjar el bastón, has descubierto que la Fuente de la locura está contaminada; así que no puedes terminar el artefacto. A menos que desciendas al lugar del que surge la locura misma, claro...
Mira tras la fuente y verás una puerta que te lleva a La Fontana.
Cruza La Fontana
Nad amás entrar, te encontrarás con un gnarl (esos hermanos chungos de Groot) que no te ataca y abrirá el camino para que puedas avanzar.

Si un gnarl no tiene un "aura" blanca, no será hostil y te abrirá las puertas bloqueadas con cristales para que puedas continuar. Dicho esto... bueno, es una mazmorra simple. Tala un par de árboles mientras avanzas, por así decirlo.
Ojo porque, a veces, los gnarls "se atascan" y tienes que empujarles (moviéndote contra ellos) para que caminen y abran puertas. Si uno de los gnarl mansos muere, busca una crisálida como la que ves bajo estas líneas (aunque la nuestra está usada y deshinchada) y podrás hacer aparecer a otro.

Otra opción para avanzar es localizar a Sacerdotes del Orden y quitarles los Fragmentos del Orden que suelen llevar encima. Con ellos también se pueden abrir las puertas. En un marcador tendrás que eliminar a varios Sacerdotes del Orden, mientras que en el otro te encontrarás a alguien del pasado cercano a quien vas a tener que cargarte. No olvides lootear su cuerpo.
Con la fuente despejada de la corrupción del Orden, vuelve a la sala del trono para usarla y poder forjar el bastón. Unos segundos después, comenzará El fin del Orden.