Órdenes es la duodécima misión de la historia de Dying Light 2. Comenzará automáticamente al final de Un lugar al que llamar hogar, tras la trifulca del Ojo de Pez. Sal de la taberna y habla con tu compañera. No hay misiones nuevas (por ahora), así que ve directamente al objetivo. Tras hablar con Grady, podremos completar un par de actividades:
- Activa el escondite #5 en Garrison.
- Cierre.
- Examen de historia.
Cuando llegues al marcador, elimina a los renegados y abre la puerta del módulo militar para ver qué ha pasado.
Tendrás que cargarte a unos cuantos malotes más. Vuelve a hablar con el soldado para saber dónde está Rowe.
Al llegar al cabrestante que te indica el soldado (si vas recto desde el soldado, verás el ascensor), verás un par de renegados, acaba con ellos. Por supuesto, hay más arriba. Ve eliminando a todos los que veas y libera a los rehenes que han tomado. Cuando esté todo despejado, podrás subir las escaleras y encontrarte con Rowe. Tras la conversación, se activa una secundaria.
Completa Cristalino y luego sigue con la historia. Tras hablar con Lawan, dile que quieres comprobar el Oservatorio y comenzará la misión del mismo nombre, Observatorio.