Cualquier jugador experimentado de Rust es consciente de que ninguna base construida es realmente impenetrable por otros. Al final, cualquier base puede caer si se dedica el tiempo y esmero suficiente en un raideo. No obstante, está en nuestra mano ponerle las cosas lo más difíciles posible a los rivales, y para ello disponemos de un montón de opciones y estrategias ingeniosas.
Si quieres conocer algunos de los trucos y consejos más útiles a la hora de defender tu base, échale un ojo a esta entrada de nuestra guía completa donde a continuación recopilamos algunos puntos importantes para ti.
Fortifica tu base lo máximo posible
Este primer punto puede parecer obvio, pero hay que tenerlo en cuenta igualmente. Cuanto más grande sea tu base más difícil será hacerla caer. Aquí no solo nos referimos a tener un montón de muros, pisos y habitaciones, sino en específico a mejorar la calidad de las estructuras creadas.
Como sabréis, una pared de madera es mucho más fácil de destruir que una de piedra. A partir del material piedra en adelante los jugadores tendrán que usar cargas explosivas si quieren atacarnos con efectividad, pero eso conlleva costes y esfuerzos por su parte. Así que se trata de farmear como loco recursos para mejorar con el martillo todas tus estructuras, hasta la última (y a poder ser a metal de alta calidad). Este será el primer paso para una mayor defensa.
Crea muchas puertas y mejóralas
Un consejo básico en el que muchos principiantes caen rápido es en tener solo una única puerta, y además de madera. Olvídate de eso. Las puertas de madera se pueden romper enseguida con herramientas o armas.
- Coloca siempre puertas blindadas de metal (ya que requieren carga explosivas para romperse).
- Crea airlocks o esclusas de aire en tus entradas para que sea un engorro para tus rivales entrar por ahí.
- Se recomienda siempre tener más de una puerta juntas, para formar las esclusas de aire.
- Además no te olvides de colocar absolutamente a todas las puertas cerraduras.
Busca un buen lugar para la base
Sobre los mejores lugares para construir tu base ya hemos hablado en nuestra guía, pero no está de más recordar aquí un par de puntos importantes al respecto.
- Construir tu base en valles abiertos o cerca de monumentos puede atraer la atención de visitantes no deseados.
- Por contra, es más recomendable establecer el lugar de nuestra base en zonas apartadas, montañas elevadas o áreas de irregular acceso para que sea más difícil de ver desde la lejanía.
- Ten siempre en cuenta tener un buen espacio a tu alrededor para la ampliación de la base.
Consejos y trucos para la defensa exterior
La defensa exterior de la base es vital y el primer paso para retener a los invasores. Si tienes una gran estructura defensiva, es muy probable que muchos jugadores decidan retirarse o no atacar porque consideren que el raideo supone demasiado gasto de recursos o es muy arriesgado.
Así pues, estos son los consejos y trucos que te damos de cara a defender tu base en el exterior.
- Por supuesto, mejora las calidades de tus estructuras: al máximo nivel posible y asegúrate de que los "lados fuertes" de las paredes quedan mirando hacia fuera.
- Los mejores muros para construir: son los muros de piedra externos altos, cuentan con 500 de salud y necesitan 2 cargas explosivas para derribarse.
- Colocar paredes con pinchos y púas: evitará que otros jugadores construyan escaleras por las que intentar asaltarte.
- Crea y coloca diversas trampas: por todo el perímetro de tu base, por ejemplo torretas automáticas cerca de puertas y entradas, o en lo alto de los muros y tejados.
- Te vendrá de fábula colocar por los alrededores: trampas de pinchos de madera y también trampas a presión y minas terrestres escondidas entre la maleza.
- No dudes en rodear toda tu base: con varias capas de muros si puedes (eso hará retroceder a los jugadores con menos recursos).
Consejos y trucos para la defensa interior
En caso de que la defensa exterior de la base falle, aún nos quedará la defensa interior, la cual es igual o más importante aún. En Rust se pueden ver todo tipo de interiores, y parte de la gracia está en ser lo más ingenioso posible con cómo distribuyes tus posibilidades.
Estos son los consejos y trucos a tener en cuenta para una buena y férrea defensa interior de tu base:
- Nunca coloques todo tu botín en un solo cuarto: eso sería un suicidio, si llegan hasta él, ya te puedes dar por acabado. En su lugar, no dudes en crear múltiples habitaciones y salas en las que repartir tus recursos por cajas.
- Esconde muy bien tu armario de herramientas: hay que ocultarlo lo máximo posible, para ello puedes crear una falsa pared con un hueco por detrás, meterlo en un cuarto muy inaccesible, etcétera. La idea es que cuanto más difícil y más tiempo tarden en hallarlo, mejor.
- Fabrica trampas interiores: como la trampa de escopeta (ideal para colocar delante de puertas y el armario) o la trampa de llamas (estupenda en esquinas) para recibir a los jugadores más ansiosos y hacer que se lleven una buena sorpresa.
- Establece muchos sacos de dormir: así te asegurarás lugares en los que reaparecer rápidamente si te matan e incluso si los destruyen (ni se te ocurra tener solo uno).
Crea salas trampa y trolls
Una buena dosis de nuestra defensa interior se basa en la idea de dedicar parte de nuestros recursos a crear salas que no llevan a ninguna parte o directamente que son trampas para los jugadores que entran en ellas. ¿A qué nos referimos con esto?
- Por ejemplo; crea una sala con una puerta simple que, al romperla, lleva a unas escaleras con un piso superior en el que no hay suelo y el jugador se cae hacia un "pozo" del que no pueda salir fácilmente.
- Otra idea es crear un pasillo con múltiples puertas que tan solo llevan a salas vacías, con la intención de desesperar a los asaltantes para agotar sus recursos o hacer que se vayan.
Eventualmente cualquier invasor puede acabar llegando a tu armario si dedica el tiempo suficiente en la tarea, pero con estos consejos esperamos que la cosa sea más complicada para ellos. No dudes en ojear cuáles son las mejores armas del juego para poder defenderte con uñas y dientes (ya que durante las invasiones también tendrás que disuadir a tus enemigos con potencia de fuego).
