En esta entrada de nuestra guía de Shadow of the Colossus (PS4) que te traemos desde Vandal, vamos a ayudarte y a darte los consejos que necesitarás de cara a hacer frente al tercer coloso de la aventura: Gaius.
¿Cómo matar al coloso Gaius?
- Enigma: "Tu próximo enemigo es... Dentro de la niebla... Un pabellón gigante se eleva a los cielos... La ira del gigante dormido rompe la tierra."
- Tipo de coloso: Bípedo.
- Dificultad: Normal.
- Altura: 30,5 metros.
- ¿Hace falta a Agro?: No.
Localización
Gaius no está lejos del templo principal, pero esta vez debes entrar un poco más en el mapa. Vuelve hacia el Norte y cruza el puente de roca que ya tomaste para ir a por Quadratus, pero no te detengas y avanza para tomar un desvío hacia el Oeste. El lugar es reconocible por un lago, llamado Lago Canopy, en el cual encontrarás una rampa por la que subir. Esta rampa lleva hacia un platillo o plataforma elevada. Como verás, aquí no te puede acompañar Agro.
- Recuerda: Ten en cuenta que con este, y todos los demás colosos, puedes alzar tu espada y seguir el haz de luz que esta emite. Te ayudará mucho a guiarte por el escenario para dar con tu objetivo.
Estrategia a seguir
A estas alturas ya conocerás las bases del juego y la dificultad empezará a subir. Gaius es uno de los colosos más grandes (aunque no el que más), y notarás enseguida que este sí es más agresivo que los otros.
Aunque su tamaño pueda echarte para atrás, en realidad gracias a esto mismo podrás predecir bastante sus lentos movimientos. La estrategia a seguir es irte primero hacia la plataforma circular del centro del escenario. Una vez ahí, espera a que Gaius levante su enorme brazo y apártate rápido.
Si lo haces bien, el coloso quedará aturdido y se le agrietará parte de su armadura, dejando al descubierto pelaje en el brazo. Ahora haz que vuelva a atacarte y en cuando clave la herramienta en el suelo de tierra sube por ella hacia su pelaje, para agarrarte y escalarlo progresivamente.
La escalada es más complicada que las otras, pero con cuidado irás llegando a sus zonas de "descanso" y al punto débil que se encuentra en lo alto de la cabeza. Procura no salir volando y no te apresures, la paciencia es tu mayor aliada con él.
Una vez derrotes a Gaius, volverás al templo y se te encargará tu siguiente objetivo: Phaedra.