La Fórmula 1 es tan de 2020. Ahora lo que está de moda es la E1, la Fórmula 1 pero con lanchas eléctricas. Esa es la propuesta que ha nacido de las mentes de Rodi Basso y Alejandro Agag, fundador de la Fórmula E y la categoría de todoterrenos Extreme E, que esperan poner en marcha esta nueva competición acuática nada más y nada menos que en la icónica ciudad de Mónaco, uno de los escenarios más emblemáticos de los campeonatos de carreras.

Las lanchas eléctricas, las protagonistas de la E1
El anuncio de esta nueva disciplina dentro del mundo competitivo tuvo lugar en el Yacht Club de Mónaco, durante la presentación del modelo hidroala de propulsión eléctrica Racebird. La E1 tiene las intenciones de trazar un circuito que abarcaría diferentes secciones de Port Hercule, saliendo fuera de puerto y bordeando toda la costa del Mediterráneo.
Se espera que al menos 12 equipos pasen a formar parte de esta nueva categoría, con las carreras previstas para dar comienzo en 2023. Cada uno de los equipos contaría con un hidroala Racebird, que alcanzaría velocidades de hasta 50 nudos (unos 92 kilómetros por hora). Funcionan con una batería de 35 kWh. Rotterdam, Países Bajos y diferentes zonas de Hungría también se encuentran como candidatas para acoger estas carreras.
En estos momentos, la E1 está en conversaciones con las autoridades portuarias de Rotterdam para incorporar estas carreras al festival World Port Days, que se celebra de manera anual en la localidad. En el caso de Hungría podrían llevar las carreras por el río Danubio, pasando enfrente del Parlamento húngaro.
Agag y Basso estuvieron presentes en el anuncio de esta nueva competición, acompañados por Sophi Horne, diseñadora de la Racebird; Brunello Acampora, fundador y director ejecutivo de Victory Marine; y Raffaele Chiulli, presidente de Union Internationale Motonautique, que es el organismo rector internacional de la navegación a motor.