Si bien en España es difícil imaginar el tener que enfrentarnos a este tipo de experiencia, lo cierto es que en otros países puede ser muy habitual verse envuelto en un tiroteo. Como no está de más prevenir, hoy nos hacemos eco de los consejos que comparte Clint Emerson, un Navy Seal ya retirado que ha querido brindar algunas pautas y guías para sobrevivir a uno de estos trágicos episodios. ¿Lo primero de todo? Salir corriendo tanto como podamos.
Consejos para sobrevivir a un tiroteo
Sí, sabemos que en situaciones de gran pánico o terror extremo es muy difícil pedirle a nuestro cuerpo que se mueva: lo más normal es que nos quedemos paralizados. Pero, si sois capaces de conseguir que vuestros músculos os obedezcan, lo mejor que podemos hacer es echar a correr (preferiblemente en zigzag) y alejarnos todo lo posible del escenario del crimen. "La gente piensa, ¡voy a morir! o 'Me van a rescatar'. Rara vez piensan en rescatarse a sí mismos", explica Clint Emerson, que también es autor del libro 100 Deadly Skills: The SEAL Operative’s Guide to Eluding Pursuers, Evading Capture, and Surviving Any Dangerous Situation.
"Es difícil para un tirador acertar a un objetivo en movimiento; zigzaguear lo hace aún más difícil", agrega. Pero, consciente de que las personas no siempre consiguen ejecutar esta acción, Emerson entonces nos brinda su siguiente consejo: escondernos. Pero no vale cualquier lugar: tenemos que ser lo suficientemente ágiles para encontrar un lugar que sea capaz de resistir los impactos de bala. También nos aconseja evitar lugares sin escapatoria, como los cuartos de baño.
"Deberíamos colocarnos detrás de objetos hechos de material antibalas como madera densa, hormigón, acero o granito. Luego pide ayuda, por teléfono, por mensaje de texto, colocando un letrero en una ventana exterior, lo que sea que funcione. Y mantente agachado", detalla Emerson. "La mayoría de las balas que rebotan siguen el camino del suelo. Así que, cuando las balas vuelen, agáchate o muévete hacia las manos y las rodillas en lugar de acostarte".
Y si nada de esto funciona, entonces nos queda una última opción: plantar cara a los tiradores. En este sentido, el factor sorpresa puede convertirse en nuestro mejor aliado: "Los atacantes a menudo asumen que sus objetivos se acobardarán al ver sus armas; es probable que cualquier reacción ofensiva los pille desprevenidos", explica Emerson. En el vídeo que os hemos dejado sobre estas líneas, podéis encontrar todos los consejos para estas situaciones de emergencia.
