BioWare ha lanzado un nuevo parche para Dragon Age: Origins, su último juego de rol, en todas sus versiones.
La versión más destacada es la de PC, pues este parche solventa unos problemas que habían experimentado ciertos usuarios asociados a la corrupción de datos de las partidas salvadas. Este parche corrige completamente los problemas asociados.
Tanto en PC como en consolas, además, se añaden algunas modificaciones para perfilar el equilibrio jugable: el maná, por ejemplo, se regenera más rápido en la exploración, y algunas armas realizan ahora más daño.
También se han corregido algunos pequeños errores menores detectados en algunos aspectos concretos del desarrollo del videojuego.