Diversos movimientos y el modo Estallido, con técnicas definitivas
Ya en el combate, tienes golpes normales poco potentes, movimientos especiales que se activan con L1 y los botones cuadrado, triángulo o círculo que no parecen tener ningún límite y parten de las habilidades de la fruta del diablo de cada luchador. Aquellos personajes que tienen Logia pueden usar la guardia con el botón R1, aunque hacerlo consume parte de una barra especial que se recarga con el tiempo.

Si tu personaje se muestra ineficaz contra el rival y no puedes romper su guardia, o tal vez ni siquiera hacerle daño porque está usando habilidades de fuego o de arena, llega el momento de cambiar a otro componente del equipo. Aquí radica la profundidad estratégica del juego y la clave para que los combates sean intensos, con continuos cambios de táctica.
En la parte superior de la pantallas aparecen esa barra especial y la de vida de los tres personajes de tu equipo, mientras que en la parte inferior se ve al equipo de apoyo (y si aquellos con ventajas activas están disponibles para activarlos con la cruceta) y la barra de estallido, que se activa con R3 cuando está llena. Lo que sucede en esos momentos es distinto para cada personaje. Por ejemplo, Drake se transforma en un dinosaurio o Franky en un robot gigante, de forma que en unos instantes el combate puede cambiar radicalmente.
Pulsar el mismo stick cuando estás en modo estallido desencadena una técnica definitiva. Luffy, por ejemplo, usa entonces el ataque Cuarta Marcha. Si con esta técnica definitiva acabas con el enemigo habrá una animación especial, porque One Piece: Burning Blood cuida este tipo de detalles, de la misma manera que, cuando empieza el combate, los personajes se dirigen frases que cambian según sea la relación que hay entre los integrantes de los equipos rivales.
La elección de personajes incluso llega a afectar a la jugabilidad. Nakajima cuenta que, aunque los miembros de un equipo no tienen que pertenecer al mismo bando de personajes y el jugador puede elegir los que más le gusten, sí han introducido algunas variaciones para potenciar la afinidad entre algunos de ellos. Por ejemplo, Sanji se hace más fuerte si hay alguna mujer dentro de su equipo.
El estudio se ha esforzado en recrear la serie visualmente y captar su espíritu
Con todos estos ingredientes, los combates son divertidos y ágiles. Los ataques y sus animaciones son espectaculares; es un control accesible, muy fácil de aprender, pero que te requiere estar pendiente constantemente de los movimientos del contrario y su elección de personajes para adecuar las características de tu luchador.

En la demo había cinco escenarios: El Palacio de Alubarna, el coliseo Corrida (en Dressrosa), el mar helado de Marineford, la cubierta del Thousand Sunny y las ruinas de Shandora. Todos nos gustaron mucho, tienen un nivel de detalle alto y son -casi todos- bastante grandes.
Quienes siguen las historias de los piratas de sombrero de paja sin duda son los que más disfrutarán de Burning Blood porque se ha esforzado por captar el espíritu de la serie, los comentarios durante los combates merecen la pena y lo mismo se puede decir de las animaciones. Los personajes son lo suficientemente variados como para amoldarse a los gustos del jugador y para que ese combate de fuerzas y debilidades quede patente y el jugador deba elegir un equipo compensado pensando en los luchadores que ha elegido el rival.
One Piece: Burning Blood saldrá a la venta el 3 de junio para PS4, Xbox One y PS Vita (los desarrolladores nos dijeron que han trabajado para que esta versión se vea con la misma calidad que en PS4). Ese mismo mes está previsto también el lanzamiento para PC. La edición coleccionista incluye un libro de arte del juego y dos figuras: una de Barbablanca y la representación de su tumba, con la lanza clavada en ella y el característico abrigo que, además, se puede poner sobre los hombros del pirata más fuerte del mundo.
Estas impresiones se han escrito después de asistir a una presentación del juego a cargo de Koji Nakajima, productor del juego, y Hiroyuki Kaneko, director de One Piece: Burning Blood, entrevistarlos y probar el juego durante una hora en la sede de Sony en Madrid.