Tanto en el Modo Aventura como al final de cada ruta del modo Smash Arcade tendremos que hacer frente a diferentes jefes finales en unos combates especiales que nos pondrán las cosas realmente complicadas. Cuando luchemos contra ellos nuestro objetivo no será otro que el de reducir la salud que tienen a cero mientras evitamos que nos echen de la pantalla con sus golpes.
A continuación os dejamos con un listado de todos los jefes del juego y algunos consejos para derrotarlos:
Ganon
El temible villano de la saga The Legend of Zelda nos hará frente utilizando su forma final de The Legend of Zelda: Ocarina of Time.
Al igual que en la inolvidable aventura de 64 bits, su único punto débil reside en su cola, por lo que intenta saltar sobre él para colocarte en su espalda y castigarle con tus ataques más potentes.
Se trata de un enemigo algo lento, así que si te fijas bien en sus diferentes patrones de ataque, no deberías de tener mayores problemas a la hora de evitar sus golpes. Eso sí, mucho cuidado con ellos, ya que tienen un rango enorme y pueden sorprendernos si no calculamos bien las distancias.
Rathalos
El dragón más icónico de Monster Hunter también aparece en Super Smash Bros. Ultimate como jefe final. Al igual que en sus juegos, puede envenenarnos con sus garras y aturdirnos con sus rugidos, además de achicharrarnos con sus potentes bolas de fuego. Por suerte, si utilizamos con algo de cabeza los objetos que irán apareciendo en el escenario no nos dará mayores problemas.
La trampas colócalas en el suelo para que acabe enterrado durante un rato cuando las pise y así poder machacarlo a placer con nuestros ataques más poderosos. De igual modo, las nueces Deku procura lanzarlas cuando se eleve en el aire y mire hacia nosotros para que así quede aturdido. También conviene destacar que todos los barriles que aparezcan son explosivos, así que lánzaselos sin miedo.
Giga Bowser
Giga Bowser es de los jefes más fáciles del juego, ya que no tiene mucha vida y sus ataques se parecen mucho a los de Bowser, por lo que son relativamente sencillos de esquivar. Eso sí, en el modo Smash Arcade primero tendremos que derrotar a Bowser en su versión normal antes de que aparezca Giga Bowser. Intenta derrotarlo antes de que te quite un 50% de daño para curarte todo el porcentaje con el tomate que te darán al cambiar de fase.
Drácula
El gran villano de Castlevania tampoco se ha querido perder la cita con Super Smash Bros. y nos hará frente en forma de jefe final. En la primera de sus dos fases se dedicará a teletransportarse por el escenario lanzándonos bolas de fuego y creando pilares de fuego. La única forma que tendremos de dañarle aquí será golpeando su cabeza, así que tómatelo con calma, ataca un par de veces y esquiva los proyectiles antes de seguir golpeando.
En su siguiente fase adoptará una de sus transformaciones de Castlevania: Rondo of Blood, convirtiéndose en una bestia gigantesca capaz de lanzar devastadores ataques y multitud de proyectiles. Aunque es mucho más poderoso, impredecible y peligroso, lo bueno es que se convierte en un blanco fácil, ya que recibe daño independientemente de la parte de su cuerpo en la que golpeemos, por lo que no dudes en atacar sin descanso haciendo breves pausas para esquivar y bloquear.
Marx
Marx es un jefe relativamente fácil, pero el combate contra él es de los más frenéticos, ya que no parará de teletransportarse para atacar. Cuando deje de moverse, significa que va a lanzar un ataque, pero aquí también tenemos el único momento en el que podemos golpear, así que no lo dudes. Eso sí, si ves que se va al centro de la pantalla y su cara se parte por la mitad, aléjate todo lo que puedas, ya que creará un agujero negro muy peligroso. Con algo de paciencia y midiendo bien los tiempos de los ataques y las esquivas, acabará cayendo.
Galleom
Galleom es un gigantesco robot que no parará de atacar lanzándonos misiles, pegando puñetazos e intentando arrollarnos con embestidas. La mejor estrategia para derrotarlo es pegarte a él y golpear como si no hubiese un mañana, procurando esquivar y bloquear cuando sea necesario. Como advertencia, cuando le quede un cuarto de vida se enfurecerá. Mientras se produce este cambio de fase, procura alejarte, ya que no recibe daño durante la transición y sus animaciones nos harán bastante daño. Cuando se enfade, sigue la misma estrategia, ya que lo único que cambia es que se vuelve más rápido y peligroso.
Master y Crazy Hand
El jefe final por excelencia de Super Smash Bros. regresa para ponernos las cosas muy complicadas una vez más. Aquí no hay mucha estrategia, ya que cada mano tiene su propia barra de vida y atacarán sin descanso. Generalmente, cuando una haga un ataque, la otra hará lo propio, por lo que hay que medir muy bien cuándo atacar y cuándo defender. Nuestra recomendación es que procuréis bajarles las vidas más o menos a la vez, ya que así conseguiremos aturdirlas al mismo tiempo y aprovechar estos segundos para castigarlas sin que nos puedan entorpecer, haciendo que nuestros ataques valgan doble.
Lúmina (solo Modo Aventura)
Lúmina es un jefe final bastante peculiar. Su único punto débil reside en su núcleo (una esfera luminosa), así que ataca ahí siempre que se pueda. El combate se hace más o menos fácil si contamos con espíritus que nos permitan curarnos, como Celebi o la Gran Hada, ya que entre cada uno de sus ataques se toma algo de tiempo, permitiéndonos regenerar vida y mantenernos siempre fuera de peligro.
Lúgubra (solo Modo Aventura)
Lúgubra es un jefe muy parecido a Lúmina, aunque sus ataques son un poco más toscos y lentos, pero también más potentes. Equípate espíritus de curación, centra tus golpes en su ojo, céntrate en esquivar cuando vaya a atacar y acabará cayendo con facilidad.
Lúmina y Lúgubra (solo Modo Aventura)
La batalla final del Modo Aventura es un tanto peculiar, ya que aquí no lucharemos contra Lúmina y Lúgubra, sino que nos veremos inmersos en un combate entre ambas deidades. Esto es algo que podemos usar en nuestro favor, ya que se dañarán mutuamente. Así pues, procura bajar sus vida de forma equitativa para aprovechar todo el daño que puedan hacerse entre ellos, aunque no te olvides ni de esquivar ni de equiparte espíritus de curación.
También conviene que tengáis en cuenta que cuando aturdáis a uno de los dos, es recomendable esperar a que la otra deidad realice su ataque, ya que también nos puede causar daños si nos pilla en medio.