A lo largo de la historia y misiones principales de Final Fantasy XVI te verás las caras con docenas de jefes finales o bosses que te esperan en cada capítulo. En esta sección te explicaremos cómo derrotar a Titán, un jefe al que te enfrentarás durante En las entrañas de lo desconocido.
Titán: ataques y cómo derrotarlo
El combate contra Titán será controlando a Ifrit. Tu enemigo golpea más fuerte que el protagonista de un shonen al final de un anime, pero por suerte es lento y tiene poca variedad de golpes.
Eso sí, será un combate larguísimo. Al lío.
- Geodestrucción: a larga distancia, Titán avanzará hacia ti, hará una finta, saltará y será al caer cuando pueda hacerte daño y tienes que esquivar el golpe. Tardará en recuperarse, dale de leches entonces.
- Clamor de la tierra: te empujará, te tambalearás y tendrás que evitar las zonas de daño que irán apareciendo por el suelo.
- Garra de suelo: puede usar este ataque tanto a corta distancia como a larga. Bajará la mano derecha y arañará el suelo. Normalmente repetirá el ataque con la mano izquierda, especialmente a larga distancia. Cada garrazo envía un proyectil de roca que puedes destruir disparando, o simplemente esquivar. Tanto la mano como el proyectil pueden hacerte daño.
- Puño sísmico: levantará uno de los puños por encima de la cabeza, para descargar luego un golpe descendente con daño de área. Puedes esquivarlo sin grandes problemas.
- Pisotones: levantará una de las piernas y golpeará el suelo con un pisotón, para acto seguido hacerlo con la otra pierna. El golpe tiene una pequeña área de efecto, puedes intentar la esquiva perfecta o simplemente echarte hacia atrás.
Después de sufrir suficiente daño, verás una secuencia y se retirará. Ahora debes disparar a las rocas que te lanza hasta que, automáticamente, aprendas la habilidad Explosión titánica. Titán usará entonces el ataque Megalito, y debes usar Explosión titánica para bloquearlo. No tienes más que mantener el escudo levantado hasta que la roca choque. Ahora tendrá nuevos ataques.
- Patada y pisotón: en un movimiento algo más rápido que el resto de ataques, dará una rápida patada de corta distancia seguida de un pisotón. Si te impacta el primer golpe, intenta echarte hacia un lado para evitar el pisotón, hacer una esquiva perfecta y contraatacar.
- Embestida: Titán bajará la cabeza y cargará contra ti. Es un movimiento que conoces de sobra de otros enemigos y se esquiva exactamente igual.
- Tremor: Titán golpeará el suelo y lanzará tres filas de rocas en arco. Puedes evitarlo colocándote ligeramente a izquierda o derecha de la cabeza de Titán, las rocas pasarán por tu lado sin hacer daño.
- Alzamontañas: tras agarrar el suelo, lanzará varias rocas gigantes contra Ifrit. Limítate a disparar para romper los proyectiles.
Tras hacerle suficiente daño, vendrá una secuencia con una Esquiva certera y un Contraataque certero. Después vendrá una fase en la que Ifrit corre de manera automática. Tendrás que disparar a los proyectiles que te caen del cielo mientras esquivas las rocas clavadas en tierra. Dispara sin parar y ve moviéndote de lado. Cuando estés corriendo por los tentáculos hay que hacer lo mismo: disparar a las rocas que caen y evitar los cristales que nacen del tentáculo, se puede hacer sin más con Esquivar antes de tocarlos.
Llegará un momento en el que Titán agarrará el tentáculo en el que estás y debes superar una Esquiva certera y más tarde un Contraataque certero antes de empezar a hacerle daño otra vez. Evidentemente, ahora sus ataques son nuevos.
- Garra maléfica: pondrá la palma de la mano sobre la roca y verás una zona de daño horizontal al otro lado. El golpe impactará ahí y saldrán varios cristales en tu dirección. Si haces una esquiva perfecta hacia los cristales podrás evitar el daño y golpear la garra.
- Puño maléfico: verás una zona de daño en línea recta hacia uno de los dos lados de la plataforma y luego hará pasar el puño en línea recta. No tiene área de daño ni nada opr el estilo, puedes golpear en cuanto empiece a frenarse. Si te acercas demasiado pronto sufrirás daño.
- Manotazo maléfico: pondrá la palma de la mano en perpendicular hacia la plataforma y tratará de llevarte por delante golpeando con el meñique. Salta por encima del dedo para evitar el ataque.
- Puñetazo maléfico: levantará el puño cerrado y aparecerá una pequeña zona de daño en uno de los dos extremos de la plataforma. Cuando golpee liberará una onda expansiva, puedes usar una esquiva perfecta o saltar sobre ella. Puede hacerlo contra cualquiera de los dos lados y usar dos oglpes seguidos, uno a cada extremo de la plataforma. En ocasiones usará el Puño maléfico seguido del Puñetazo maléfico.
Después de hacerle suficiente daño tendrás que superar una Esquiva certera. Volverás a una plataforma para luchar contra él y tendrá nuevos ataques.
- Megalito: es la roca gigante de antes. Puedes hacerle una esquiva perfecta o bloquearlo con Explosión titánica.
- Lluvia granítica: caerá una rociada de rocas que golpearán en las zonas de daño que se vayan marcando en el suelo.
Tras hacerle suficiente daño, de nuevo tocará una Esquiva perfecta. El combate sigue igual pero a veces golpeará con el tentáculo la plataforma, lanzando una onda que debes esquivar o saltar. No es siquiera un ataque recurrente, lo usará una o dos veces nada más. Al acabar esta fase de daño debes superar tres Contraataques certeros. Ahora tienes que ir apuntando a los proyectiles de roca mientras bajas hacia Titán. Asegúrate de disparar al tentáculo después de romper los proyectiles, de lo contrario te llevarás más de un golpe. Al llegar abajo toca otro Contraataque certero antes de la siguiente parte del combate.
Ahora lucháis ambos en el aire. Sólo cuenta con un golpe cuerpo a cuerpo muy lento, algunos proyectiles y, más adelante, el Megalito (esquívalo o usa Explosión titánica y Tremor (échate hacia el lado opuesto al que golpee para evitar daño). Cuando le hayas hecho suficiente daño tendrás que terminar el combate con una Esquiva certera, un Ataque certero, un Contraataque certero, una Esquiva certera y un último Contraataque certero para rematar el combate por fin.
Recuerda que éste no es más que uno de los muchos enemigos a los que te enfrentarás en Final Fantasy XVI. Si tienes problemas para acabar con él, es posible que te venga bien cambiar de arma o usar alguna habilidad adicional.