Desde que salió al poco del lanzamiento de Super Nintendo, la serie ha estado presente en todas las consolas de la compañía japonesa, convirtiéndose en uno de los buques insignias de la misma y en uno de los juegos que más gustan a todo tipo de público. Cuando se anunció el lanzamiento de 3DS ya se mostró un vídeo en el que no se mostraba ninguna novedad (más allá del efecto 3D, claro), pero en la conferencia de este año se anunciaron algunas de las cosas nuevas que aportará a la saga y tras probarlo, hemos podido ver cómo funcionan algunas.
Cuando empezaba la demo podríamos escoger entre ocho jugadores clásicos como Mario, Luigi o la princesa y, a continuación, elegir nuestro coche. Esta vez no tendremos una serie de coches entre los que elegir sino que podremos escoger la carrocería, las ruedas y lo que parecen ser los accesorios (en la demo sólo se podía escoger uno, el ala delta). Suponemos que la configuración de nuestro coche afectará de forma importante a nuestro rendimiento en carrera o a la adaptación a los circuitos, aunque en la única carrera que pudimos jugar no llegamos a apreciarlo.
El control nos ha parecido muy bueno, siendo totalmente accesible. Sigue estando el turbo derrape que, en función de cuanto dure el derrape, será más potente o menos. En la demo que probamos sólo vimos ítems clásicos, como el turbo, la cáscara de plátano o los caparazones, por lo que no podemos adelantaros que novedades habrá al respecto.
Una vez comenzamos a correr vimos que el juego se mueve estupendamente y que los escenarios están llenos de detalles. Pronto pudimos probar otra de las novedades, el poder transformar nuestro vehículo en un híbrido como, en el caso de la partida que jugamos, un ala delta. Así, en un momento en el que dábamos un gran salto, automáticamente el ala delta se abría y nos permitía planear hasta el suelo. Mientras estábamos en el aire podríamos movernos hacia los lados, tratar de remontar altura o caer en picado, eso sí, tanto el sacar el ala delta se hace de forma automática, o al menos nosotros no dimos con la forma de quitarlo hasta llegar hasta el suelo o retrasar su salida.
El hecho de que el ala delta sea un accesorio que debemos elegir al configurar el coche nos hace pensar que sólo podremos tener un tipo de vehículo híbrido a la vez, es decir, que si es un kart ala delta no podrá ser submarino, lo que hará que tengamos que elegir bien nuestro coche dependiendo del circuito donde estamos para así poder sacar el mejor rendimiento. De ser así suponemos que nos encontraremos con circuitos que tendrán rutas alternativas en función de qué tipo de vehículo tengamos, lo que seguro que aumenta más la estrategia de las carreras.
En cuanto al apartado gráfico se ve muy bien y se mueve estupendamente. Lamentablemente tenía pinta de que estábamos corriendo en los 50cc, por lo que la velocidad no era muy alta (algo que pasa en todos los juegos de la saga en la cilindrada más baja). Algo que nos ha gustado es que hemos visto que se ha solucionado el efecto molesto que producía el humo de los karts en primer plano y que habíamos podido ver en los vídeos que se habían mostrado del juego.
La sensación que nos deja este nuevo Mario Kart es bastante buena. Por una parte nos encontramos con el mismo espíritu de Mario Kart de siempre, lo que hace que nada más coger la consola estemos jugando sin problemas, pero por otra parte han sabido innovar con la configuración de las piezas del vehículo y especialmente por las nuevas posibilidades que se abren, como planear o ir bajo el agua. Aún es pronto para juzgar estas novedades, pero al menos en la partida que jugamos el uso del ala delta estaba muy bien integrado y no estropeaba la experiencia para nada. Ahora queda esperar a una versión más avanzada que nos descubra todas las sorpresas que nos tiene guardadas el título.