A cuatro días del estreno de la segunda temporada de The Last of Us en Max, surgen las dudas. La sensación es que la serie no ha logrado concretar las altas expectativas que se han generado. Pese a la gran expectación generada con sus avances, parece que la segunda tanda de episodios de The Last of Us de HBO no ha estado a la altura.
Parece que la adaptación de los los videojuegos de Naughty Dog sigue siendo un tema candente, pero esta nueva entrega parece estar navegando por aguas turbulentas y que, aunque se han enfatizado los episodios con grandes escenas de acción y un gran reparto, y que el futuro está asegurado con una tercera temporada, los nuevos episodios no han captado la atención ni han sido tan contundentes como los de la primera temporada. Y eso es un grave problema.
La segunda temporada de The Last of Us no logra brillar en Rotten Tomatoes y muchos creen que no está al nivel de los primeros episodios
Desde los avances hasta las decisiones creativas, la temporada 2 ha sido objeto de más de una controversia. Y, aunque esto no es nada nuevo en el mundo de las adaptaciones, la falta de una dirección clara empieza a hacerse más evidente. HBO, que ya ha renovado la serie por una tercera temporada, parece confiar ciegamente en la marca, aunque el público sigue a la espera de que la narrativa consiga la solidez que la primera temporada logró, aunque no sin sus propios tropiezos.

Con un 92% de aprobación en Rotten Tomatoes -que podéis comprobar- tras las primeras reseñas profesionales, la crítica se muestra cautelosamente positiva, pero la cifra deja en claro que la segunda temporada no ha alcanzado el brillante 96% de su predecesora. Si bien no se puede negar el esfuerzo, esta nueva entrega sigue sin ofrecer la contundencia y cohesión que muchos esperaban.
El reparto sigue siendo uno de los puntos más aplaudidos, destacando la labor de los grandes protagonistas, Pedro Pascal y Bella Ramsey, quienes mantienen el tipo y logran dar vida a unos personajes que, si bien siguen siendo entrañables, parecen haber perdido algo de su frescura original. Sin embargo, la serie está lejos de encontrar el mismo nivel de conexión emocional que logró en su inicio, como os comentábamos en nuestra crítica.
El verdadero reto de esta temporada no está solo en cómo se adapta el material original, sino en cómo se mantiene relevante para una audiencia que, tras el éxito de la primera, ahora exige más que meros guiños a los videojuegos. La crítica parece estar reservada, y con razón: lo que pueda ofrecer el público, desde el lunes 14 de abril, podría ser la verdadera prueba de fuego para la serie.