God of War Ragnarok es un juego intergenaracional que saldrá en PS4 y PS5, pero que aprovechará las capacidades técnicas de la consola de última generación de Sony. Como es habitual en los títulos que salen tanto para las consolas de 2020 como para las de 2013, hay ajustes gráficos para priorizar la fluidez de la experiencia o la calidad visual. Pero la aventura de acción de Santa Monica Studio va más allá, equiparándose a lo que están haciendo otros equipos de PlayStation Studios.
La epopeya de Kratos y Atreus tiene cuatro modos gráficos en PlayStation 5, según repasa este artículo de Press Start, que aprovechan las posibilidades de los televisores actuales con entrada HDMI 2.1, con alta tasa de refresco y con tasa de refresco variable (VRR):
- Resolución: 4K / 30 FPS fijos
- Rendimiento: Resolución variable / 60 FPS fijos
- Preferencia de resolución (Alta tasa de refresco): 4K / 40 FPS fijos (requiere HDMI 2.1)
- Preferencia de rendimiento (Alta tasa de refresco): 120 FPS como objetivo (requiere HDMI 2.1)
Así, quienes quieran una experiencia lo más fluida posible y no necesiten ver hasta el último pelo de la barba de Kratos, pueden optar por el modo 120 FPS si su televisor o monitor tiene las tecnologías requeridas, pues no son estables, pero la tasa de refresco variable evita que percibamos la caída de fotogramas. Pero aquellos que disfruten viendo un espectáculo audiovisual pueden disfrutar de una experiencia mucho más fluida: el salto de los 30 FPS a 40 FPS se nota mucho.
Los 40 FPS comienzan a popularizarse en PlayStation Studios
Como apuntábamos antes, esto no es algo inédito. The Last of Us Parte 1, de Naughty Dog, se estrenó en PS5 con un modo 40 FPS, que fue popularizo por Insomniac Games, quienes lo introdujeron en Ratchet & Clank: Una dimensión aparte, y posteriormente en Spider-Man: Miles Morales y Spider-Man Remastered.
Este viernes hemos publicado nuestras impresiones con las primeras horas de God of War Ragnarok. "Puede que no sea tan novedoso y haya perdido el impacto que tuvo la entrega de 2018, pero es algo que compensa de sobras ofreciéndonos un juego mucho mejor en todos los sentidos y donde cada paso del camino supone una nueva sorpresa", escribe Carlos Leiva. "Los combates son una delicia, tiene un ritmo genial, los puzles son muy gratificantes, los contenidos secundarios están trabajadísimos, la historia y la narrativa nos tienen fascinados, audiovisualmente es un portento y la sensación de aventura es constante".
