Las siete mazmorras anteriores pueden completarse en cualquier orden. Cuando hayas rescatado a los Siete Sabios se te hará entrega de la Trifuerza del Valor. Sube la escalerilla a por lo que te pertenece.
Tu destino final es el Castillo de Lorule. Ahora es el momento de que termines todas aquellas tareas secundarias pendientes, como rescatar los 100 maimai, conseguir las 28 piezas de corazón (teniendo así 20 corazones de salud), comprar todas las armas en la tienda de Ravio y mejorarlas con mamá maimai, forjar a su nivel máximo la Espada Maestra con los minerales maestros y llenar tus cinco botellas para ir plenamente equipado.
Si has seguido esta guía ya tendrás todo lo mencionado a punto, así que dirígete al Castillo de Lorule.
Cruza el puente central y activa la veleta ("Castillo de Lorule").
Al acercarte a la puerta, Hilda anulará el sello que bloquea el castillo. Ve por la izquierda, sube las escaleras y fúndete en la pared junto a la segunda estatua. Desplázate hacia la derecha para alcanzar un cofre y abrirlo. Contiene una rupia roja.
Vuelve por la misma pared y ve por la puerta norte. Link se quedará atrapado en la siguiente sala, junto a un enemigo bastante fiero al que hay que derrotar. Cúbrete de sus ataques con la estatua o fundiéndote en la pared, y ataca con tus mejores armas a distancia. Una vez derrotado, prosigue por las escaleras hacia el primer piso.
Sigue recto por la puerta del sur. Avanza por el balcón y entra por la primera puerta que encuentras a la derecha. Derrota al enemigo y recoge el cofre, en cuyo interior hay otra rupia roja.
Apaga los dos braseros de esta misma sala y ve hacia el sur para descubrir un camino invisible hacia una plataforma más alejada, donde hay otro cofre esperándote. Conseguirás una rupia plateada.
Regresa por el camino luminoso, sal por la puerta y toma las escaleras del sur. Llegamos al segundo piso. Golpea el cristal que hay a la derecha de las dos estatuas para hacer aparecer el portal que te teletransporta al inicio de la mazmorra. Luego empuja las dos estatuas por el saliente, hacia abajo, y lánzate tras ellas. Ya puedes coger el cofre (llave pequeña) que viste antes.
Baja un peldaño por el sur y ve hacia la derecha para volver al punto anterior con el portal. Con tu recién adquirida llave podrás abrir la puerta que tienes recto a la izquierda, la cual te lleva al tercer piso. Ve hacia el este y recoge el cofre de la pasarela: ya tienes la brújula.
Apaga los dos braseros para revelar un par de caminos ocultos muy estrechos hacia el sur. Cruza por cualquiera de ellos para llegar frente a un gran cofre, que guarda las ropas rojas.
Fúndete en la pared sur y desplázate hacia la esquina, dejándote caer justo cuando acabes de pasar a la pared este. Caerás al primer piso, pero estarás sobre una pequeña repisa. Desde aquí, fúndete en la pared sur y desplázate en el sentido de las agujas del reloj hasta llegar a la puerta de la pared oeste. Entrando hallarás una fuente de hadas. Baja un peldaño y abre el cofre (cuerno de monstruo).
Déjate caer a la planta baja. Toma el teletransporte y ve por la puerta del noroeste, que se abrirá al acercarte. Baja las escaleras y usa los cristales para abrirte paso por las celdas. Recuerda que puedes activarlos con armas a distancia e incluso lanzar bombas por encima de los bloques elevados.
Cuando ya no puedas avanzar más porque la siguiente celda está demasiado elevada, deja una bomba junto al cristal y ponte sobre los bloques azules bajados. Al explotar la bomba, tú te elevarás con ellos. Sitúate sobre los bloques rojos de la derecha y lanza una bomba al cristal superior para repetir técnica. Abre el cofre y obtén una rupia roja.
Golpea el cristal, deja una bomba y ve corriendo a ponerte sobre los bloques rojos que había al lado oeste. Al sureste descubrirás una flor bomba. Lánzale una bomba pequeña por encima de los bloques o dispara el Cetro de Hielo. Esto hará que estalle y despeje el camino. Fúndete en la pared y da un rodeo para llegar hasta ella. Golpea el cristal de la derecha y llévate la flor bomba contigo hacia el oeste y luego el norte.
Lanza una bomba o usa el Cetro de Hielo en el cristal que hay al otro lado de la barrera. Ocúpate de los enemigos que tienes alrededor para que no te hagan estallar la flor bomba y luego sigue avanzando jugando con los cristales y las bombas. Finalmente tendrás que ir hacia el este, con cuidado de que un enemigo de los invencibles no te estalle la flor bomba. Haz que reviente frente a la gran roca agrietada, así podrás coger el cofre (llave pequeña).
Déjate caer por el saliente de la derecha y abre la puerta con cerradura. Tienes ante ti al jefe de la Torre de Hera, por lo que ya sabes cómo se mata. No obstante, el método más seguro es quedándote en el peldaño elevado y lanzando bombas a mansalva o atacando con el Cetro de Hielo. Una vez derrotado, ponte sobre el panel violeta.
Ve por la puerta del noreste, que se abrirá al situarte sobre la baldosa interruptor que tiene delante. Cruza la sala hacia el norte y acércate a la lava por donde está la rupia roja. Verás que unas plataformas emergen para construirte el camino. Síguelas hasta que se dividan en dos: toma el del norte y luego ve hacia el oeste para llegar a un cofre. Contiene cola de monstruo.
Vuelve sobre tus pasos y toma el otro camino, hacia el este y luego al norte. Llegarás a una plataforma con una estatua y una bola de pinchos atascada detrás. Aparta la estatua hacia la izquierda y sigue a la bola en su recorrido hacia el sur. Cuando ya no puedas avanzar, fúndete en el bloque elevado y desplázate hacia el balcón del suroeste. Ve por la puerta sur.
Acércate a uno de los lados para que se eleve un muro de bloques. Ponte de espaldas al muro y saca tu escudo, porque enseguida empezarán a salir disparadas las baldosas hacia ti. Una vez se hayan agotado, se alzará un suelo enrejado y aparecerá una escalera por la que podrás seguir avanzando.
Sigue el camino que se abre ante ti hacia el norte. Llegarás hasta la pared del fondo, donde una bola con pinchos cae de la pared a la lava. Al acercarte suficiente se le situará una plataforma debajo, de manera que podrás ir guiando su camino hacia el sur hasta hacer que choque con la bola de pinchos que había parada más abajo. Las partes en que el camino te aleja serán más complicadas, pues tendrás que fundirte rápidamente en los muros, pasando por su lateral exterior.
Una vez lo consigas, podrás seguir el nuevo camino hacia el cofre, que atesora una llave pequeña.
Regresa por las plataformas que emergen hasta la puerta cerrada que había a la izquierda de la plataforma con la estatua. Por ella llegarás al primer piso, donde tendrás que enfrentarte a otro mini-jefe. Lo ideal es que ataques con armas a distancia, pues así evitas que te electrocute y que el retroceso te lance a la lava. Además, puede venirte muy bien congelarlo con el Cetro de Hielo. Al terminar, ponte sobre el panel violeta.
Ve por las escaleras de la izquierda al tercer piso. La puerta del noroeste se abrirá cuando pises la baldosa interruptor que tiene delante. Sube las escaleras y apaga el brasero: verás que hay un camino invisible y que un muro se despliega cuando estás a oscuras. Así pues, debes memorizar el recorrido para hacerlo cuando tengas el brasero encendido, de manera que puedas avanzar hasta que un muro se cierra por tu izquierda.
Es momento de encender el brasero y avanzar a tientas este delicado paso, por el cual llegas a un cofre que contiene una llave pequeña.
Vuelve sobre tus pasos, enciende el brasero y ve hacia el norte. Abre la puerta por la que subirás al cuarto piso. Tienes que derrotar al enemigo, al que solo puedes ver si llevas la lámpara equipada. No obstante, esto mismo hace que te rodeen las sombras y no veas los obstáculos, así que lo mejor es acorralar al mini-jefe y no dejarle moverse demasiado. Para ello, emplea la combinación Cetro de Hielo + espadazos.
Pisa el panel violeta y sube por las escaleras al piso superior. Cruza la sala y emplea el gancho para tirar de la palanca que hay a la izquierda de la puerta noreste. Ponte en el saliente de la derecha y engánchate a la pared de madera del otro lado. Cruza por la plataforma móvil y abre el cofre (rupia púrpura).
Tira de la palanca cercana con el gancho y deja que la plataforma móvil que acabas de activar te lleve a su destino.
Fúndete en la pared de la puerta y desplázate hacia la izquierda. Vuelve a tu forma original en la siguiente plataforma, poniéndote debajo del ojo, esperando a que la mano venga y rompa las baldosas que lo sostienen. Congela la lava y pasa con el ojo para lanzarlo sobre la plataforma móvil. Luego vuelve hacia atrás, fúndete en la pared y recoge el ojo desde el otro lado. Ponlo en la estatua.
Sube sobre la balsa que hay al norte de las estatuas y desplázate por el río de lava valiéndote del gancho. En la segunda esquina, espera a que la mano venga y aplaste el interruptor rojo.
Sigue avanzando hasta llegar a una plataforma con tres interruptores rojos y una estatua. Pon la estatua sobre el interruptor central. Luego ponte sobre uno de los otros dos y espera a que la mano vaya a caer sobre ti. Justo en ese instante, ve corriendo al tercer interruptor. Los tres se pulsarán a la vez y se abrirá camino por el sur.
Una vez más, ponte bajo el ojo para que la mano lo aplaste y rompa la plataforma que lo sujeta. Coge el ojo y recorre el camino inverso para ponerlo en la segunda estatua. Abre el cofre: dentro hay una llave pequeña.
Ya puedes abrir la puerta de atrás, que te llevará al último mini-jefe. Ya conoces el procedimiento para acabar con él, a fuerza de gancho + espada primero con cada pequeño ojo y luego esquivando sus embestidas y rayos mientras le vas atacando cuando tengas ocasión. Recuerda que puedes usar el Cetro de Hielo para congelarlo y cancelar sus movimientos. Una vez derrotado, ve al panel violeta.
Los cuatro paneles iluminados se abrirán ante ti. Es buen momento para usar el portal de teletransporte y guardar partida en la veleta. Cuando ya estés listo, avanza por la gran puerta. Fúndete en la grieta del fondo si quieres llegar a una fuente de hadas. Luego regresa a Lorule y ve por la derecha, directo al enfrentamiento final contra Yuga en el salón del trono.
Tras la escena con Hilda, empezará el combate. Yuga Ganon te atacará básicamente con su lanza, aunque también tiene un conjuro de relámpagos rojos. Concéntrate en esquivar y mantenerte en constante movimiento, dando espadazos cuando lo tengas cerca o, si ves que se te escapa mucho, usando también las armas a distancia, como el Cetro de Hielo.
La segunda parte del combate es radicalmente distinta. Ahora Yuga Ganon te lanzará bolas de energía, que tendrás que devolverle con un espadazo. Él te la devolverá también, así que sigue respondiendo hasta que se la coma. Zelda te llamará y te hará entrega del arco y flechas de luz. Equípatelo sin más demora.
Fúndete en la pared y lánzale una flecha de luz. Rápidamente, pasa a tu forma original y vuelve a fundirte en la pared, pero esta vez por el otro lado de Yuga Ganon. Aséstale otra flecha. Las flechas a lado y lado harán que se salga de su estado de pintura. Sal tu también de la pared y dale todos los golpes que puedas. A continuación tendrás que esquivar la energía oscura que sale de las paredes, hasta que Yuga Ganon regrese y volváis a empezar desde el rebote de la bola de energía.
Finalmente, no lanzará solo una bola de energía, sino dos. Tendrás que acertar con ambas. Además, en la pared no habrá forma de darle con las flechas de luz, así que ponte al otro lado de la sala y dispárale por la espalda, de manera que la flecha le venga por sorpresa. Yuga Ganon saldrá y un solo espadazo más bastará para poner fin al combate.
Acércate al cuadro de Zelda para iniciar las escenas finales del juego. Al regresar a Hyrule, sigue a Zelda y toca la Trifuerza. ¡Enhorabuena, has terminado The Legend of Zelda: A Link Between Worlds!