Análisis de Killer Instinct Season 2 (Xbox One)
Killer Instinct es probablemente el ejemplo perfecto de cómo los jugadores solemos llevarnos erróneamente las manos a la cabeza antes de probar un juego. Cuando se presentó hace un par de años en el E3, la reacción de la comunidad al regreso de esta querida saga no fue especialmente cálida, ya que ni su modelo de negocio (gratuito, en constante evolución y pagando por personajes) ni el rediseño de algunos luchadores clásicos (muy alejados de los originales) gustaron demasiado entre sus fans más veteranos.
De hecho, el juego fue incluso ninguneado por los jugadores profesionales en el EVO 2013, por donde pasó con más pena que gloria. Pero algo cambió cuando Xbox One finalmente se puso a la venta, día en el que también se estrenó este Killer Instinct. Si bien el juego salió prácticamente en pañales y con una cantidad de contenidos irrisoria (solo seis personajes y ni siquiera tenía un modo arcade), su jugabilidad consiguió callar muchas bocas, gracias a un sistema de combate tan accesible como profundo, una plantilla de personajes muy bien diferenciada y un sabor clásico que respetaba por completo la esencia de la saga para ofrecernos batallas en las que los golpes se suceden a una velocidad de auténtico vértigo con larguísimos combos.
Además, su modelo de negocio resultó ser todo un acierto, ya que nos daban la opción de comprar los contenidos que quisiéramos a la carta. ¿Queremos tenerlo todo? Compra un pack con todos sus personajes a precio reducido, ¿Solo te interesa jugar con un par de luchadores? Compra solo esos dos. Y decimos personajes porque todos los modos de juegos están disponibles de forma gratuita, incluyendo su multijugador online (siempre y cuando seamos miembros de Xbox Live Gold, claro).
Esta forma de vender el producto también traía consigo otra ventaja para Microsoft: la posibilidad de convertir el juego en una plataforma de lucha persistente y en constante evolución. Y vaya si ha evolucionado Killer Instinct desde su lanzamiento a finales del 2013 hasta ahora, habiendo pasado de ser "solo" un buen título a todo un imprescindible para los amantes del género.
La gran culpable de esta mejora ha sido, sin lugar a dudas, su fantástica segunda temporada que acaba de terminar, con la que Iron Galaxy ha demostrado estar a la altura a la hora de tomar el testigo dejado por Double Helix. Nueve personajes nuevos, más modos de juego, una interfaz muy mejorada y una jugabilidad reequilibrada y perfeccionada son algunas de las novedades de las que hemos podido disfrutar a lo largo de esta temporada, y tal y como iréis descubriendo a lo largo de este texto, todas ellas son de gran calidad.
Los mejores asesinos
La inclusión más importante de toda esta segunda temporada la tenemos en la llegada de nueve nuevos personajes (uno de ellos, Omen, exclusivo para los compradores del pack con todos los luchadores de la temporada) entre los que se incluyen tanto nuevas caras como viejos conocidos muy demandados por los fans de la saga.
Estos son: Hisako, Maya, TJ Combo, Aganos, Riptor, Kan-Ra, Aria, Cinder, Omen. Hisako es el espíritu de una joven japonesa inspirado en lo que solemos ver en las películas de terror niponas. Probablemente sea uno de los personajes que más nos han gustado de todo el juego, sino el que más, ofreciéndonos un estilo de combate tremendamente original y muy espectacular de ver en movimiento, combinando potentes contras con combos usando una Naginata y poderes espirituales. Y todo ello sin olvidarnos de la forma que tiene de moverse por el escenario, con unos movimientos rapidísimos (mucho ojo a sus animaciones) que contrastan con la lenta velocidad a la que golpea.
Por otra parte tenemos a Maya, una luchadora rápida y letal que cuenta con un estilo de combate muy ofensivo y acrobático que nos permitirá movernos por el escenario mientras golpeamos sin piedad a nuestros rivales. Además, sus combos nos permitirán despistar fácilmente al enemigo para que falle el siempre temido Combo Breaker. Su otra gran característica la tenemos en el uso de dos dagas que puede arrojar y utilizar de muy diversas maneras, ya sea para atacar a distancia o ampliar combos.
En lo que respecta a TJ Combo, tenemos a un boxeador con el que resulta muy fácil ejercer presión sobre el rival, ya que sus potentes golpes y movimientos nos permitirán mantenernos siempre pegados al enemigo para no dejarle espacio y tenerle siempre donde le queremos. Mención especial a los combos que puede ejecutar cuando consigue levantar al rival del suelo, realmente dañinos si sabemos hacer buenas combinaciones manuales.
Aganos es un gigantesco gólem que ocupa gran parte de la pantalla. Tal y como podréis imaginar, se trata de un luchador lento y muy pesado, además de un blanco fácil, pero que sabe compensarlo con una serie de golpes de los que hacen tiritar la barra de vida del enemigo. Además, muchos de sus movimientos los puede ejecutar incluso aunque reciba golpes, lo que puede hacer de él un rival bastante molesto, ya que hacerle retroceder no es una tarea sencilla.
Riptor es una de las luchadoras que más echábamos de menos en esta entrega, por lo que el anuncio de que regresaría en esta temporada nos alegró bastante. Esta veterana dinosaurio mejorada genética y cibernéticamente es uno de los personajes más rápidos de todo el juego y antes de que nos demos cuenta ya la tendremos encima nuestra mordiéndonos, achicharrándonos y metiéndonos zarpazos y coletazos desde todos los ángulos posibles. Además, su peculiar diseño hace de ella una combatiente especialmente escurridiza y contra la que tendremos que replantearnos nuestras estrategias.
Kan-Ra es otra de las nuevas incorporaciones de este Killer Instinct, una momia con un estilo de combate bastante peculiar que nos permitirá tener controlado todo el escenario a placer. Es capaz de desplazarse de un lado a otro del escenario de un solo salto, puede plagar el campo de batalla de trampas, cuenta con muchos agarres y ataques a media y larga distancia, y en distancias cortas tampoco sabe defenderse precisamente mal, aunque no sea su especialidad. Es algo más complicado de manejar y de dominar que la mayoría, pero muy divertido y satisfactorio cuando conseguimos desesperar al enemigo y tenerle bailando a nuestro son.
En cuanto a Aria, la nueva jefa final de la historia, cuenta con tres modos de combate totalmente diferentes y entre los que puede cambiar a placer. Esto también trae consigo tres barras de vida en vez de dos (aunque cada una se baja más fácilmente que la de un personaje normal), una por cada forma, lo que nos llevará a tener que dominar las tres para alzarnos con la victoria, haciendo de ella una luchadora muy estratégica, completa y con una inusitada profundidad de juego.
Cinder es otro de los grandes favoritos de la saga que los fans llevábamos reclamando desde que se anunció el juego y que en su nueva encarnación no ha decepcionado para nada, ofreciéndonos un luchador muy rápido y versátil. Cuenta con una gama de movimientos muy variada, entre las que se incluyen buenos ataques a media distancia, proyectiles y combos cuerpo a cuerpo muy espectaculares. Además, cada ocho segundos encenderá sus llamas, lo que provocará que muchas de sus técnicas ganen efectos adicionales, lo que le da una plus de complejidad y de posibilidades estratégicas muy bien recibido. Destacar también el espectáculo que supone verle repartir tortas y encadenando buenos combos.
Finalmente tenemos a Omen, un personaje que solo obtendremos si compramos la edición Combo Breaker o Ultra de esta temporada. Además de su peculiar forma de saltar planeando, se trata de un personaje rapidísimo, con buen alcance, proyectiles bastante molestos y una capacidad para sumar números al contador de combo muy por encima de lo normal, gracias a la posibilidad que tiene de sumar golpes al aumentar la potencia de los mismos. Eso sí, esto también le hace algo predecible y nos da mucho espacio para realizar un buen rompedor de combo, aunque en manos expertas es un personaje muy divertido y bastante efectivo.
A todo lo que hemos comentado de cada uno, tenemos que sumarle las diferentes peculiaridades y rasgos pasivos de cada personaje, ya que no solo cambian sus estilos de combate, técnicas y formas de realizar golpes. Cada uno tiene una serie de habilidades pasivas que les permiten hacer cosas totalmente únicas, lo que ayuda a diferenciarlos más todavía si cabe del resto, dándoles una personalidad muy marcada.
Como veis, todas las nuevas inclusiones de la segunda temporada nos han gustado mucho, con personajes muy bien diferenciados, completos y que ofrecen propuestas realmente distintas, por lo que raro será que no encontréis uno que se adapte a vuestras preferencias y estilo de juego. Y si ninguno os convence, seguro que en la primera temporada encontraréis lo que buscáis.
Algo que nos ha alegrado mucho ha sido comprobar el buen equilibrio que hay entre personajes y no hay más que pasarse por los rankings online para comprobar cómo casi todos ellos aparecen en los primeros puestos, algo que suele ser muy difícil de ver en los juegos del género, donde un grupo de selectos combatientes suelen predominar en las listas.
Renovando modos y menús
Pero no solo de personajes vive esta segunda temporada, ya que se han añadido y rediseñado modos de juego. El modo Arcade de la primera temporada ha sido rebautizado como modo Historia, ofreciéndonos un prólogo y hasta tres epílogos para cada uno de los combatientes. Cada final nos pedirá que cumplamos una serie de requisitos para poderlos ver, por lo que nos tendremos que pasar el juego tres veces con cada luchador para desbloquearlo todo.
Si bien con los personajes de la primera temporada este modo es algo más básico, con los de la segunda nos encontraremos incluso con vídeos y con imágenes estáticas que nos irán enlazando cada combate, así como con Aria haciendo de jefe final, lo que hace que sea mucho más interesante de jugar, especialmente si tenemos en cuenta que las historias de todos los combatientes se van entrelazando en diversos momentos.
Por otra parte, se ha añadido el modo Laboratorio, donde podremos entrenar a la IA para que aprenda a jugar como nosotros y otros jugadores se puedan enfrentar a ella. Nos ha sorprendido lo buena que resulta la IA de los luchadores que entrenamos, ya que hemos visto que cometen incluso los mismos fallos que nosotros y ejecutan prácticamente los mismos tipos de combo. Hasta adoptan nuestro estilo de combate a la hora de ir a la ofensiva o a la defensiva. Muy interesante, aunque todavía no están disponibles todos los personajes para ser entrenados.
También hay que destacar la inclusión de las Ligas Igualadas para el multijugador online, un modo destinado a los jugadores más competitivos y en el que podremos ir ascendiendo puestos y rangos hasta llegar a los más alto. De hecho, a los 32 mejores combatientes de cada mes se les recompensa con un título y rango especial. Lo bueno es que tiene un sistema de emparejamientos que funciona bastante bien a la hora de encontrar un rival a nuestra altura, por lo que los combates suelen ser bastante igualados.
Tampoco podemos olvidarnos de mencionar el añadido de un modo Práctica destinado a entrenar única y exclusivamente los rompedores de combo, algo que nos será tremendamente útil para las batallas reales, ya que aquí aprenderemos a reconocer los movimientos de cada luchador para saber qué Combo Breaker realizar, probablemente la característica del juego a la que más horas le tendremos que echar para dominarlo.
Además de los modos de juego y los personajes, con esta temporada se han rediseñado los menús por completo, haciéndolos ahora mucho más accesibles e intuitivos y ofreciéndonos bastante más información en las listas de movimientos para que podamos conocer todos los datos necesarios sobre cada uno de ellos. De la misma forma, el sistema de progresión del jugador se ha retocado para facilitar el desbloqueo de recompensas (lo que nos invita a jugar más y más) y hacer que cuenten también nuestras partidas offline, un gran acierto y una mejora considerable respecto a lo que experimentamos cuando el juego se estrenó en el 2013.
El espectáculo de la lucha
A nivel gráfico también nos encontramos con diversas novedades, como la mejora de varios efectos o el aumento de resolución de los 720p originales a los 900p actuales, sin que ello haya afectado para nada a la tasa de imágenes por segundo, manteniéndose en todo momento a unos robustos 60 fps. Además, los nuevos escenarios que se han incluido para la ocasión son una auténtica pasada y realmente variados, por lo que no pararemos de ver cómo se van transformando sin parar y reaccionando al desarrollo del combate. Killer Instinct puede que no sea un referente gráfico, pero si un título muy espectacular y atractivo a la vista. De la misma forma, todo esto se puede aplicar a los diseños de los nuevos personajes, acertadísimos en su gran mayoría, tanto de los nuevos como las puestas al día de los más veteranos.
Finalmente, tenemos una grandísima banda sonora que ha sumado nuevos y geniales temas musicales que nos meterán de lleno en todos y cada uno de los combates, ambientando muy bien todo lo que ocurre en pantalla y aumentando más todavía (si es que esto es posible) el frenetismo de las batallas. Como siempre, estas nuevas composiciones son totalmente dinámicas, por lo que se van acelerando y modificando su intensidad según lo que suceda durante las luchas, consiguiendo que cada golpe vaya al son de la música. Sin duda, una de las mejores bandas sonoras que hemos escuchado nunca en un juego del género.
Para redondear el apartado sonoro, tenemos unos efectos que suenan con gran contundencia y un doblaje inglés que, en el caso del narrador, es simplemente perfecto. Destacamos la voz del narrador de los combates no solo porque lo borde con sus míticos comentarios, sino porque al resto de personajes apenas les escucharemos articular más de dos frases, aunque también le ponen muchas ganas a los gritos que emiten durante las peleas.
Conclusiones
No nos vamos a andar con rodeos: Killer Instinct es ahora mismo uno de los mejores juegos de lucha que existen para la nueva generación de consolas. Uno que cualquier amante del género y en posesión de una Xbox One no debería dejar escapar, ofreciéndonos un sistema de combate totalmente único y con su propia personalidad que se aleja de las propuestas habituales de las que hacen gala sus competidores.
Luchadores carismáticos y muy bien diferenciados, una cantidad de contenidos aceptable, combates frenéticos y espectaculares como ellos solos, una buena infraestructura online (a veces tarda algo en encontrar partida, pero el código de red funciona de maravilla) y la promesa de seguir ampliando contenidos en el futuro son sus actuales cartas de presentación. Y si la segunda temporada ha hecho tantísimo bien a Killer Instinct, no podemos estar más impacientes por descubrir lo que traerá consigo la tercera.