Análisis de Final Fantasy X/X-2 HD Remaster (PS4, PC)
Hace poco más de un año llegó a PlayStation 3 y PS Vita la remasterización de Final Fantasy X y X-2. PlayStation 4 ya estaba en la calle y quizás su éxito pilló desprevenida a Square Enix, que no tenía lista una versión para ella. Dispuesta a enmendar este error, nos llega ahora Final Fantasy X/X-2 HD Remaster para PS4, que es tal y como se esperaba, una conversión a la nueva consola sin demasiadas sorpresas –aunque alguna tiene-.
La justificación de nuestro alto interés por recibir esta revisión –la actual o la lanzada en la pasada generación- se encontraba en la deficiente calidad de los originales en Europa: ausencia de selector 50/60 HZ –se jugaba un 17% más lento- y una proporción de la pantalla sin overscan que cayó en la llamado conversión PALeta. Un drama por tratarse –en el caso de FF X- de uno de los grandes lanzamientos de PlayStation 2 y de los primeros vendeconsolas de 128 bits, no de un título menor.
Naturalmente esta deuda quedó resarcida en 2014. Por una parte PS Vita tiene una ventaja sobre otras plataformas: dos clásicos modernos del rol en portátil. PlayStation 3 corría el juego un poco mejor y se podía disfrutar en gran pantalla. PlayStation 4 no aporta mucho respecto a esta última salvo mejoras mínimas que explicaremos a continuación.
Final Fantasy X y X-2: los juegos
Ambas entregas se decantaron por la narración y aspecto cinematográfico a costa de reducir la libertad de exploración. Se podría decir que Final Fantasy XIII intentó seguir este camino, pero no lo hizo tan bien como X. Si es cierto que casi toda la aventura la recorremos de manera continua y sólo hacia el final tenemos la posibilidad de volver a lugares anteriores para realizar las muchas tareas secundarias, como buscar componentes para desbloquear armas definitivas para cada personaje, subir de nivel por encima de lo normal o enfrentarnos a durísimos enemigos ocultos. No nos olvidamos tampoco del sorprendente juego deportivo Blizball, un entretenimiento opcional capaz de consumir muchas horas por su toque estratégico y gestión de equipo. Estos elementos hicieron que, siendo lineal, Final Fantasy X disimulase mucho mejor sus carencias que XIII. Hay multitud de secretos que investigar tirando de guías, incluyendo invocaciones extra, que lo convierten en muy rejugable.
Por encima de todo está su sistema de combate, de los Final Fantasy que siguen el funcionamiento tradicional es el más ágil y cómodo de cuantos hemos visto -si acaso exceptuando el de su secuela-. Tres personajes en pantalla con posibilidad de llamar a otros tres, roles bien diferenciados para cada uno y un sistema de habilidades mediante tablero –hoy día usado por muchas otras sagas-, control directo de invocaciones y espectaculares ataques finales. Hay unas pocas mecánicas que ahora han envejecido peor, por ejemplo los enemigos aleatorios o el infrautilizado sistema de interacción con el escenario durante las batallas –sólo usado en un puñado de combates contra jefes-, así como la imposibilidad de controlar la cámara en la exploración –esto se nota mucho- o de saltar las cinemáticas, que es un inconveniente si te las conoces de memoria.
Final Fantasy X-2 cambió el tono y por influencia de las tres chicas protagonistas –Yuna, Rikku y la incorporación Paine- aparecieron las vestisferas, una representación de los cambios de rol mediante nuevos atuendos. El sistema de batalla es diferente, pero igual de satisfactorio y ágil, y Square Enix tomó buena nota de los comentarios a la primera parte para dar una mayor libertad en exploración desde nuestra nave voladora, varios finales y la opción nada común en la saga de nueva partida manteniendo objetos encontrados en la primera vuelta.
La recepción de X-2 fue un poco más fría de lo esperado, ya desde su anuncio –nunca se había visto una secuela de este tipo con un juego que parecía cerrado- la estética de pop dividió a los fans. También fue criticado el reciclaje de algunos gráficos y que en líneas generales la tecnología del motor no había avanzado, parecía una expansión. Pese a todo, tuvo ventas millonarias y el consenso mayoritario es que, dejando a un lado gustos personales por los temas tratados, es un buen juego de rol, sólo un poco por debajo de las entregas principales, que por supuesto estando en esta colección deberías como mínimo probar y así tener tu propio criterio.
Final Fantasy X|X-2 HD Remaster como remasterización
HD Remaster hace lo que se espera de este tipo de recopilatorios: las versiones definitivas de Final Fantasy X y X-2 con mejoras gráficas y de contenido.
Como os contamos en nuestro análisis para PS3 y PS Vita, el Final Fantasy X europeo ya había añadido nuevos jefes –Eones oscuros- y cambios respecto a Japón –donde fue relanzado- como el tablero de esferas avanzado, de manera que en cuanto a X no habrá novedades sustanciales. La única diferencia está en Eternal Calm, una cinemática de unos 15 minutos vista en la versión International que conecta el final de X con X-2, que estaba anunciado en aquel momento. Está disponible en el menú inicial como una opción independiente, no es necesario completar el juego.
Final Fantasy X-2 también se basa en la versión más completa, en este caso International+Last Mission, con cambios en gráficos, velocidad, diálogos, dos nuevas vestisferas, un creador de criaturas, más de 150 personajes para usar en combate y Last Mission, una nueva misión tras el final del juego que presenta una torre con 80 pisos en la que encontramos jefes y pistas de lo sucedido a personajes que encontramos en la historia. También se encuentra de manera separada a X-2, por lo que podrías saltar directamente a él si ya has terminado a la secuela en PS2. Por último en cuanto a contenido exclusivo de HD Remaster tenemos una grabación de voces contando acontecimientos posteriores a los juegos.
Se han restaurado muchas de las texturas de personajes y fondos, cambiado modelados –algunas caras no han gustado a todos los jugadores-, gana con la alta resolución que nos permite ver los muchos detalles de vegetación que en PS2 no lucían por su tamaño y hay una mayor fluidez, podemos decir que el resultado es muy notable. Kingdom Hearts se apoyaba más en texturas de colores claros y gráficos no muy recargados, es por eso que podemos asegurar que la revisión ha sentado mucho mejor a Final Fantasy X y X-2 que a Kingdom Hearts, aunque el trabajo que tengan entren bambalinas sea similar.
La versión de PlayStation 3 corría a 720p con antialiasing o a 1080p sin antialiasing –dependiendo de la configuración del sistema-. En PlayStation 4 funciona directamente a full HD, con más nitidez, y además se han revisado más elementos gráficos de personajes secundarios o monstruos, que son siempre los que más cantan por la diferencia de calidad respecto al equipo protagonista.
A decir verdad, la mayoría de estas mejoras –respecto a PS3- son difíciles de ver si no se hace comparando pantalla con pantalla, pero el resumen es que, por mínimo salto que tenga, se ha trabajado un poco más en el aspecto gráfico. Eso no significa que sea la revisión perfecta: hay efectos que se podrían actualizar, sustituir el motion blur original por uno mejor y hay aspectos que claramente muestran su origen; aún hay hombros con aristas, la captura de movimientos es reducida, las caras tienen escasa variedad de gestos o por ejemplo, la sincronización labial no acierta demasiado. Este tipo de defectos no empañan un juego que aún guarda su magia y creemos que todo comprador es consciente de lo que representa el Remaster, no un remake.
La banda sonora de Final Fantasy X se renovó con 60 temas que versionaban los sonidos digitales por una orquesta –o remixes, según el caso- a cargo de Masashi Hamauzu, uno de los compositores del original. Como os comentamos en el anterior análisis, salvo un par de partituras que han cambiado lo suficiente como para que notemos la diferencia, el resto –tirando de memoria- pasan más desapercibidos.
No siempre los puristas están de acuerdo con estas modificaciones y sienten mucho apego por la música que escucharon en 2001/2. Es una estupenda decisión incluir esta vez un selector entre la nueva y vieja música –accesible desde las opciones, en cualquier momento-, que contentará a todos los usuarios y permite comparar fácilmente qué temas suenan mejor y cuales han perdido identidad.
Mencionar otro beneficio colateral de la remasterización: los tiempos de carga han sido reducidos, más todavía que en PS3. También se pueden aprovechar las funciones del sistema operativo, como las de Share. La versión es compatible con las partidas guardadas de PS3 y PS Vita –ya lo era entre esas dos consolas-, que es un buen incentivo para quienes tengan la aventura sin completar y decidan pasar a esta plataforma, aunque recordamos que estas remasterizaciones no son cross-buy y se deben adquirir por separado.
Conclusiones
Poco que descubrir a estas alturas de Final Fantasy X y X-2 como juegos. Final Fantasy X es considerado por una parte de los jugadores como el último de los grandes de la serie. Nosotros, de la época moderna, nos quedaríamos con el controvertido y arriesgado Final Fantasy XII –esperamos ver una remasterización de International Zodiac Job System, que todavía está sin anunciar-, si bien hay que reconocer que el juego de Tidus y Yuna tiene mucho más de Final Fantasy y los avances que realizó –voces, salto a las tres dimensiones- fueron algo equiparable a ver a Cloud por entornos renderizados tras los 16 bits.
Final Fantasy X-2 no es tan redondo, pero su visión más desenfadada de Spira, la oportunidad de conocer el destino de los héroes de X o su sistema de combate lo hacen un estupendo RPG japonés con decenas de horas para esta colección. Olvida los muchos prejuicios que siempre han acompañado al juego y encontrarás una continuación como mínimo arriesgada.
Las diferencias de PS4 respecto a PS3 son mínimas y no justifican una nueva adquisición a menos que definitivamente quieras dar carpetazo a la pasada generación. Pero en cualquier caso, sea en PS4, PS3 o PS Vita, existen motivos suficientes para que disfrutes de su historia si no lo has hecho antes. Final Fantasy X|X-2 HD Remaster limpia y da esplendor a una de las etapas más exitosas de la saga, repleta de personajes memorables y épica que con esta revisión podrás revivir como no pudiste en PlayStation 2.