(Esta noticia contiene información sobre el argumento de God of War: Ragnarok)
El 20 de abril de 2018 salía God of War, una nueva historia de Kratos, el semidios espartano que protagonizó una primera trilogía ambientada en la mitología griega y que se trasladó en el juego de PS4 y PC a tierras nórdicas. En aquel juego había un personaje que sobrevolaba la historia pero que jugó un papel destacado en Valhalla, el DLC del siguiente título de la serie, God of War: Ragnarok. Se trata de Týr, hijo de Odín y dios de la guerra, aunque se dedicó a conseguir la paz.
Santa Monica Studio ha decidido celebrar el sexto aniversario del lanzamiento del juego explicando cómo fue la creación de este personaje destinado en la parte narrativa a ayudar a Kratos a redimirse y en la parte de la jugabilidad a cerrar la experiencia roguelite de Valhalla. El equipo se propuso diseñar un encuentro entre Kratos y Týr que iría evolucionando a lo largo de cuatro combates para terminar con un desafío con capacidad de rejugarse.
Conocer más a Týr
Tras descubrirse que el Týr que Kratos y Atreus habían liberado en Svartalfheim era en realidad Odin disfrazado como su hijo para conocer los planes del espartano, el estudio, cuenta Santa Monica en su blog, sabía que los jugadores querían conocer más a Týr, el equivalente en la mitología nórdica al Ares griego que Kratos derrotó en 2005 en el primer God of War (2005).
En un largo texto en el blog del estudio los directores, diseñadores y guionistas van desgranando cómo llegaron al concepto de que Týr ayudase a Kratos a comprender y aceptar sus acciones en Grecia, dándole al mismo tiempo la función de ser casi un terapeuta y de ser un oponente que ofreciese buenos combates (Santa Monica quiso que a la hora de luchar Týr fuese un espejo de Kratos) y también se desgrana cómo se diseñaron los cuatro enfrentamientos entre ambos personajes.
