Uno de los aspectos más interesantes de todo Vampyr lo tenemos en que cada uno de los ciudadanos de Londres es un personaje único con su propio trasfondo, historia, personalidad y círculos sociales, por lo que si investigamos sobre ellos descubriremos multitud de historias que, de otro modo, nos habríamos quedado sin conocer.
Además de sus implicaciones narrativas y argumentales, los habitantes de la ciudad también juegan un rol muy importante en el propio desarrollo de la aventura, dándonos la posibilidad de participar en multitud de misiones secundarias, abriéndonos las puertas de lugares y cofres a los que no podríamos acceder de otro modo e incluso pudiendo provocar la caída de un distrito entero.
Del mismo modo, si eliminamos a alguien para alimentarnos, este desaparecerá de la partida para siempre, ya que la muerte para los ciudadanos es permanente.
Estas son las diferentes cosas que tenéis que tener en cuenta en relación a ellos.
Pistas
Las pistas son informaciones clave referentes a cada personaje. Para obtenerlas tendremos que conversar con ellos, encontrar y leer ciertos documentos, escuchar conversaciones a escondidas cuando actúen de forma sospechosa (esto ocurre cuando vemos su corazón brillar con los sentidos vampíricos) y completar las misiones opcionales que nos encarguen.
Cada pista nos dará acceso a nuevas opciones de diálogo tanto con ellos mismos como con los personajes que formen parte de su círculo cercano, las cuales a su vez pueden llevarnos a descubrir más pistas.
Investigaciones
Las investigaciones son misiones secundarias relacionadas con los personajes que conoceremos y que nos llevarán a cumplir todo tipo de tareas para poder avanzar en las tramas de cada ciudadano. Muchas de ellas nos abrirán las puertas de nuevos lugares, nos recompensarán con experiencia, pistas, armas y documentos, y, en algunos casos, existe más de una solución posible para finalizarlas, cada una con sus propias consecuencias.
Para que nos asignen estas investigaciones, tendremos que hablar con cada habitante de la ciudad para descubrir si necesitan ayuda o no, por lo que no esperéis que se os indique con un icono quién tiene un encargo para darnos.
Salud de los ciudadanos
Cada vez que descansemos en una cama para subir de nivel, el tiempo pasará y, por tanto, los habitantes de la ciudad serán susceptibles de sufrir algún tipo de enfermedad o, en el caso de que ya tuvieran problemas de salud, agravar su malestar.
Para evitar esto, nos tocará tratarlos suministrándoles las medicinas que necesiten en función del tipo de mal que sufran. Para ello, simplemente tendremos que hablar con ellos y ofrecerles el tratamiento. Una vez hecho esto, nos tocará descansar para que pase un día y los medicamentos hagan su efecto.
Los ciudadanos no pueden morir por enfermedad, aunque si tenéis a muchos personajes enfermos sin tratar, esto afectará negativamente al estado de salud del distrito.
Calidad de la sangre
La calidad de la sangre determina la cantidad de experiencia que un ciudadano nos dará al asesinarlo. El nivel de calidad aumenta cuantas más pistas descubramos sobre el personaje en cuestión del que nos queremos alimentar, aunque a esto también afecta su salud.
De este modo, si tenemos todas las pistas y nos preocupamos de tratar sus enfermedades para que esté sano, podremos obtener su máximo posible de experiencia cuando lo devoremos.
Estado de salud de los distritos
Los distritos tienen un nivel de salud que varía según nuestras acciones. Asesinar a alguien y no tratar enfermedades afectará negativamente al medidor de un distrito, al igual que tomar ciertas decisiones durante la historia principal. En cambio, si nos preocupamos por curar a la población y mantenerlos a todos vivos, veremos cómo el nivel de salud de los mismos crece.
La salud de los distritos afecta principalmente a los precios de los bienes que nos ofrecen los mercaderes del lugar, por lo que podremos hacer mejores negocios cuanto más saludable esté la zona.
Eso sí, si descuidamos un distrito y este cae hasta el nivel de salud "hostil", perderemos esa zona, todos sus habitantes morirán (impidiendo que nos podamos alimentar de ellos) y los lugares que antes eran seguros estarán repletos de enemigos. Lo positivo de todo esto es que todas las puertas y cofres que antes estuviesen bloqueados ahora estarán abiertos, lo que nos ahorrará pasar por ciertas tareas secundarias.