Con apenas unos pocos meses de margen, Square Enix ha lanzado dos de sus juegos de rol más esperados por los fans, Dragon Quest XI: Echoes of an Elusive Age –PS4 y PC- y Kingdom Hearts III –Xbox One y PS4-. Del primero de ellos todavía hablaremos a lo largo de 2019 porque aún queda mucho por ver con Dragon Quest XI S: Ecos de un pasado perdido – Edición definitiva, una versión para Nintendo Switch que trae novedades en contenido.
La versión para Switch estuvo prevista desde un principio -incluso antes de conocer el nombre comercial de la consola- junto a la de PlayStation 4 y Nintendo 3DS, pero el lanzamiento de la consola hace apenas dos años y la espera a versiones de Unreal Engine 4 más optimizadas han retrasado su salida. Puesto que el juego para portátil no será distribuido en Occidente, Square Enix y Nintendo –distribuidora de DQ XI S fuera de Japón- esperan compensar esta diferencia de tiempo con mejoras en varios aspectos.
De la calidad de Dragon Quest XI como juego no hay dudas. En nuestro análisis comentamos que "supone la culminación de más de 30 años de historia de una de las sagas más importantes e influyentes de nuestro hobby favorito, ofreciéndonos una odisea tan clásica como fascinante que no olvidaremos fácilmente. Una buena historia, grandes personajes, aventuras constantes, emocionantes combates y un mundo bello y vivo es lo que aquí encontraréis. Si echáis de menos los JRPG en su versión más clásica pero con la tecnología y escala de un juego actual, aquí encontraréis una compra prácticamente imprescindible. No os lo perdáis".
Una de estas novedades viene a solucionar la queja de muchos jugadores: la inclusión de una banda sonora orquestal. La versión de Switch permite escuchar la original –sintetizadores- y otra de mayor calidad con orquesta. De esta polémica os hablamos en nuestra columna VGM, y es que tras Dragon Quest VIII: El Periplo del Rey Maldito son muchos los fans que piden una grabación orquestal de los temas compuestos por Koichi Sugiyama.
El público japonés está más acostumbrado al sonido retro, pero la decisión no gustó fuera del país nipón, donde además también ha criticado la propia calidad de esta música.
"La solución que se ha tomado rápidamente entre los jugadores ha sido la de crear un mod que habilita la música orquestal en PC, pero dado que esto infringe el copyright de ©Sugiyama Kobo, Square Enix y la JASRAC perseguirán estas modificaciones, como han hecho al deshabilitarla con la última actualización", os contamos en el artículo. Hablando del apartado sonoro, DQ XI S permitirá escuchar las voces en inglés o japonés -novedad también para el público japonés-.
Quizás más importante para Dragon Quest XI S sean las nuevas historias específicas de distintos personajes, momentos en los que serán los protagonistas de estas aventuras. Se trata de misiones integradas en la historia, no son un extra tras completar el juego. Hay más cambios en el argumento, aunque entrar en detalle se puede considerar spoiler, y tiene relación con la posibilidad de ampliar el número de opciones en el matrimonio. Hay muy pocos detalles sobre estos nuevos eventos, pero esperamos que en los próximos meses se muestren ejemplos de estas nuevas historias. En cuanto a la jugabilidad, se ofrecerá la opción de acelerar la velocidad de las batallas.
No llegará la versión de Nintendo 3DS, pero una de sus características ha sido llevada a Dragon Quest XI S: hablamos de la posibilidad de alternar entre gráficos 3D y 2D. Al inicio del juego en las pantallas de 3DS se puede ver el mismo juego con dos estilos diferentes; en la superior tenemos un juego en 3D, similar a por ejemplo Dragon Quest VIII en la misma portátil, mientras que en la pantalla inferior aparece una versión 2D similar a las entregas de 16 bits de Dragon Quest –más tarde el jugador debía elegir una de las vistas, intercambiables en la iglesia-.
Esta curiosidad ha sido recuperada en Switch y promete traer mucha nostalgia a los jugadores clásicos de Dragon Quest –especialmente en Japón- o incluso para que una segunda partida sea una experiencia diferente. No obstante, el trabajo de Square Enix y Orca parece bastante bueno con la adaptación a Switch de los gráficos 3D; hay reducción de detalle, efectos de iluminación y aparición súbita de elementos más visible, pero no parece una gran pérdida y muchos de los defectos pasarán inadvertidos en el modo portátil. Toda una muestra de las posibilidades de Unreal Engine 4 en la máquina de Nintendo.
A la venta en otoño
El pasado diciembre Yuji Horii, creador de la saga, lamentó que Dragon Quest todavía no sea una saga excesivamente popular fuera de Japón. Y es fácil conocer el motivo: una distribución tardía –DQ VIII fue el primer juego principal en llegar a Europa-, mientras que Final Fantasy ya estaba más que asentada y con múltiples spin-off. Para conseguir ese éxito es imprescindible que Square Enix siga apoyando Dragon Quest en Occidente y que se acorten los plazos de lanzamiento entre regiones, comenzando por Dragon Quest XII, del que Horii ya tiene ideas.
Dragon Quest XI S: Ecos de un pasado perdido – Edición definitiva parece la oportunidad perfecta para entrar en esta aventura si no lo has hecho ya, o incluso para dar una nueva oportunidad gracias a sus novedades. Promete ser un imprescindible del rol japonés para los usuarios de Nintendo Switch cuando se lance este otoño.