Lanzamiento: 31 de octubre

Battlefield 4 nos demostraba como ningún otro todo lo que la nueva generación podía dar de sí al igual que un PC de gran potencia. Así, vimos como el juego se muestra continuista en las raíces pero es totalmente capaz de sumergirnos en la guerra total. El multijugador sigue siendo la punta de lanza de un título brutal en cuanto a gráficos y que sigue adoleciendo de una campaña que cada vez se convierte en más residual. Pese a estar bien configurada en guión acaba siendo muy secundaria y se escuda en un online que es la carta de presentación de todo aquel que guste de un juego de guerra con multitud de opciones.

En esta ocasión también se hizo especial hincapié en el levolution, algo que ya había empezado su andadura en la anterior versión y que ahora ya podemos ver en todo su esplendor. Bastan unas cuantas horas de juego para ver como paredes, muros y estructuras desaparecen delante de nuestros ojos para dejarnos un campo de batalla totalmente diferente del que habíamos estudiado justo antes de la ofensiva. Ver una cobertura buena no promete tenerla cuando volvamos a girarnos para buscar protección. El global no mejora la jugabilidad pero muestra un toque más profundo en lo que a gráficos se refieren, el salto a la nueva generación se nota en consolas y las hace estar un poco más cerca del aún dominante PC. En todo caso, un juego que merece la pena gozar en nuestras máquinas.