Lanzamiento: 7 de agosto
Starbreeze daba un vuelco a toda su carrera con Brothers: A Tale of Two Sons, un proyecto distinto a toda la producción anterior que nos presentaba un título desarrollado con presupuesto reducido e inspirado en obras ya maestras como el propio Journey. El director del juego Josef Fares, se declaró abiertamente fan de la compañía thatgamecompany, lo que lo llevó a crear un Brothers con detalles que hacían referencia a dicho juego. La historia parte desde el punto en el que dos hermanos han perdido a su madre, una situación que nos llega sin paliativos ni introducciones.
El golpe es fuerte y a partir de ahí se demuestra que el juego viene para quedarse. El peligro de perder a su padre les lleva a un mapa y la búsqueda de lo que conocen como "el agua de la vida". A partir de ahí arranca una aventura cargada de buenos momentos y una serie de elementos técnicos y gráficos que deslumbran al jugador. Bien iluminado y de estética muy mimada Brothers tiene ese poder de engancharnos no tan solo a la historia, sino al entorno con una ambientación que sorprende paso a paso. Como dijimos en nuestro análisis, "este juego es una experiencia que debéis disfrutar". Uno de esos títulos que vienen una vez cada tanto y que tenemos que pillar al vuelo.