Google tiene todo un imperio en la red gracias a diferentes servicios y productos, siendo su pilar clave su todopoderoso buscador que, desde hace años, no tiene rival a pesar de que han surgido distintas alternativas para hacerle frente.
Para seguir dominando con mano de hierro en la red y continuar ingresando millones y millones de dólares en publicidad lo de Mountain View también tienen que invertir una buena cantidad de dinero en, por ejemplo, pagar a Apple para ser, año tras año, el buscador por defecto de Safari, el navegador web que viene preinstalado en todos los iPhone y que se utiliza de forma predeterminada en estos teléfonos.
Este pago se realiza de forma anual y el montante de este año, según los analistas de Bernstein, llegaría a los 15.000 millones de dólares, una cantidad con la que Google quiere "convencer" a Apple y "espantar" a Microsoft que también estaría interesada en que su buscador Bing fuera el predeterminado de los iPhone.
Teniendo en cuenta que hay unos 1000 millones de teléfonos de este tipo en el mundo, esta oferta también significa que Google cree que podría obtener al menos 15 dólares por usuario durante el próximo año, dinero que obtendría por la publicidad que vemos todos los días en el navegador.
El año que viene podría llegar a los 20.000 millones
Siguiendo con los datos que maneja Bernstein, Google pagó en 2020 unos 10.000 millones de dólares a Apple para asegurarse ser un año más el buscador predeterminado de Safari mientras que el montante que podría pagar en 2022 estaría entre los 18.000 y los 20.000 millones, todo para "asegurarse de que Microsoft no supere su oferta". Todo esto mientras los usuarios de iPhone se han mostrado críticos con Apple por esta clase de tratos, algo que ha obligado a los de Cupertino a ir añadiendo poco a poco soporte para otros motores de búsqueda como DuckDuckGo y Escosia.
