China, que en los últimos años ha avanzado enormemente en el desarrollo de su propio programa espacial, ha comunicado una serie de hallazgos relacionados con la superficie lunar. Al parecer, y según científicos del país asiático, se han encontrado vidrio en las muestras recogidas por la misión Chang'e 5, aquella que se hizo en 2020. Mientras la NASA se apoya en SpaceX y Elon Musk para sus misiones Artemisa en la Luna, China toma la delantera y se atreve a hablar del primer gran paso de cara a sustentar la construcción de bases permanentes en nuestro satélite.
China piensa en la Estación Internacional de Investigación Lunar y se aventura a hablar de bases permanentes en nuestro satélite: este hallazgo sustenta su visión de futuro
El hallazgo demuestra que el suelo lunar, y quizás en más partes de lo que creemos, tiene las mejores propiedades para atesorar enormes cantidades de vidrio. "La superficie lunar ha demostrado tener excelentes propiedades para formar y moldear material de vidrio" han explicado los expertos que han analizado las pruebas recogidas por el Rover en 2020 y que pertenecen al Instituto de Física de la Academia China de Ciencias. Según relata Global Times, y en boca del investigador Shen Laiquan, estos materiales se podrían usar "para producir materiales de construcción in situ en la superficie lunar".
Es decir, teniendo en cuenta los recursos naturales del satélite, como el agua congelada y otros elementos, es más que probable que los futuros constructores de los asentamientos tengan más materiales de lo que se esperaba en un principio y que los envíos anexos o misiones desde la Tierra en lo relativo al transporte de útiles sean menos frecuentes, con lo que se ahorraría dinero, tiempo y se tendría un margen mayor para el éxito de tamaña campaña.
Hay que destacar que, en futuras misiones, China tiene previsto establecer en la Luna la Estación Internacional de Investigación Lunar (EIIL) con la cooperación de otros países, como ya ha declarado junto a la NASA, que piensa regresar al satélite en las próximas décadas. "El vidrio sufrió graves impactos de meteoritos a múltiples escalas que van desde kilómetros hasta nanómetros, y las diferentes formas del vidrio que podrían reflejar la intensidad de la colisión", remarcaba el experto Zhao Ruiz, emocionado por el descubrimiento, que además de dar soporte una mejor gestión de los recursos en la Luna, permitirá comprender cómo se formó el satélite, pese a que hay teorías muy asentadas al respecto.
"Es importante para comprender la formación, la evolución y la composición del suelo lunar", remataba. No obstante, China va a por todas. El programa Chang’e, bautizado en honor a una diosa de las leyendas chinas que reside en la Luna, arrancó en 2007 y, en apenas unos años, ha conseguido hitos gigantescos, como el del alunizaje en la cara oculta de la Luna, algo que ningún país había conseguido hasta la fecha. La Chang'e ha ofrecido datos y descubrimientos muy importantes, como lo es la reserva de agua de millones de toneladas oculta en suelo lunar, un factor vital de cara a la colonización. Colonización que será el primer paso para viajar hasta Marte y, llegado el momento, más allá de los confines de nuestro Sistema Solar.