Las primeras consolas de Enoc Enocguitar Benítez iban con una generación de retraso respecto a la que había en el mercado, explica al principio de una entrevista por videollamada. "Además, mi padre vendió la tele, nos compró bicis a mi hermana y a mí y nos apuntó al Círculo de Lectores y hasta los 18 años no he tenido televisión, tenía un monitor y algunas consolas que iba consiguiendo de esas de segunda mano", añade. Se puso al día con PlayStation 2, que ya pagó de su bolsillo. Hoy día, afirma, agradece que fuera así "porque he devorado libros y, con lo que me gustaban a mí la tele y los juegos, hubiese perdido esa parte de cultura".
Estudió música y durante unos años vivió de ella, pero su vida laboral terminó yendo por otros derroteros y es directivo en una compañía de seguros, pero durante años ha compaginado su trabajo con, durante el tiempo libre y las vacaciones, la creación de contenidos y, ahora cada vez más, con la composición de bandas sonoras de videojuegos.
Versiones de bandas sonoras de videojuegos
Benítez se remonta a 2011, cuando se produjo el bum de popularidad de Youtube y explica que a él le gustaba mucho jugar a Call of Duty y decidió subir vídeos suyos jugando aunque hoy se avergüenza un poco de ellos. Un día jugando a The Elder Scrolls V: Skyrim, con banda sonora de Jeremy Soule, alguien le comentó que por qué no probaba a tocarla con la guitarra. "La banda sonora de Skyrim me encantaba. Luego Jeremy Soule no me gusta nada después de toda la mierda que salió de él, pero es una banda sonora espectacular y pensé darle un toquecito flamenco. Me quedé satisfecho, tuvo cierta repercusión y dejé de subir cosas de juegos, que tampoco valía mucho para eso, y me dediqué a hacer covers de bandas sonoras" que están en el canal de Youtube Enocguitar.
El canal iba bien porque, dice, "algunas revistas me apoyaron. Como siempre he sido muy comercial le enviaba mis covers a los creadores de los juegos o a los compositores. Por ejemplo, Austin Wintory, cuando hice el cover de Journey, le flipó. Hice con guitarra la melodía esa que va con chelo", afirma Benítez, y cuenta que cuando Wintory se encargó de la banda sonora de Assassin's Creed: Syndicate se lo envió a Benítez y le propuso que hiciera "un cover loco. Lo hice y a partir de ahí hemos tenido muy buena relación hasta el punto de que he grabado guitarras para él en el juego The Pathless, salgo en los créditos. Ahora viene, que va a haber un concierto en Barcelona y me gustaría ir para conocerlo personalmente, que solo nos conocemos virtualmente", apunta.
PlayStation Talents necesitaba músicos
Cuando el canal de Youtube ya estaba funcionando Benítez logró entrar en la creación de música de videojuegos por dos vías. La primera se abrió cuando PlayStation España creó el programa PlayStation Talents, con unos premios a cuyos ganadores se daban ciertas facilidades para sacar adelante sus proyectos.
Al principio solo estaban los estudios, pero, dice Benítez, "les faltaban brazos, entre ellos para la música de los juegos. Hicieron una especie de concurso en el que enviabas música tuya y los elegidos creaban la banda sonora de los juegos de PlayStation Talents". A él siempre le había atraído la idea de crear una banda sonora de una película o un videojuego y decidió aprovechar la oportunidad.
Con la convocatoria de los Talents hubo cierta polémica porque Sony se reservaba los derechos de usar lo que enviaban los compositores, "yo no tuve problema en escribirles directamente para preguntar cómo iba aquello y me dijeron que no, que simplemente era que si tenían que publicitar quién había sido seleccionado utilizar la música que habíamos enviado y no reclamásemos derechos".
Primera banda sonora: Phobos Vector Prime
Benítez estuvo entre los seleccionados y empezó con un juego desarrollado en Sevilla, Phobos Vector Prime, para PS4. Afirma: "Caliebre Le liebre es un youtuber que me ayudó a hacer la banda sonora, nos llevábamos muy bien y nos compenetrábamos muy bien con la música. Pero al final nos desvinculamos [del juego] porque yo no veía cómo los estaban llevando. Al final esperaban una serie de cosas que luego no fueron así por h o por b y ellos se habían ido metiendo en préstamos y les supuso prácticamente cerrar el estudio con su primer juego".
La segunda vía de su entrada a los videojuegos fue a través de The Game Kitchen, que había comenzado el Kickstarter del primer Blasphemous, "los conocí en Sevilla. Me pidieron un poco de asesoramiento inicialmente junto a Carlos Viola. Estuvimos grabando unos concepts para la música. Estaba decidido que Carlos lo iba a hacer y yo me desvinculé porque, además, ni estaba ya en Sevilla y él ha hecho un trabajazo espectacular tanto en el I como en el II, pero ya fue picar un poquito y ver que me gustaba", apunta Benítez.
Una asociación nacida en Gamepolis
En Gamepolis le pidieron que organizase un concierto de covers y reunió un equipo de músicos. Uno de ellos era el guitarrista Carlos Romero, "nos caímos muy bien y coincidían las inquietudes que teníamos respecto a los juegos y la música. Le propuse que hiciéramos música juntos y a partir de ahí empecé a hacer la parte comercial pura y dura que esa sí he hacerla. Con unos cuantos concepts que teníamos y varias cositas que íbamos haciendo empecé a buscar trabajo yéndome a los eventos, yendo a las cenas que había de los desarrolladores, invirtiendo un poco económicamente en toda esa parte", afirma.
Valor adicional
Él ya conocía como creador de contenidos tanto a desarrolladores como a otros creadores como Pazos o Eric, a Fukuy, a Arturo Monedero o Carlos Coronado. Dice Benítez: "todo el mundo le ofrecía mis servicios e intentaba dar un valor adicional de hacer la musiquilla del juego y poderle dar bombo si lo jugaba Pazos o nosotros en directo y fuimos consiguiendo un poquillo trabajo".
Después de Phobos Vector Prime se encargó de la banda sonora del juego de cartas Deck Hunter, de L_Draven, y en dos proyectos de The Breach Studios: para el juego La Liga Top Cards, publicado en colaboración con Panini y otro juego que el estudio no llegó a publicar. El siguiente proyecto de Romero y Benítez de música y sonido fue para realidad virtual: Vanishing Grace, de Monteperdido"me gustó muchísimo hacer la música aunque es un juego que no ha tenido mucha repercusión porque salió exclusivo de las Oculus", señala Benítez. En los últimos tiempos también han trabajado en Project ST, de The Breach Studios, que está aún en desarrollo. De algunos trabajos más pequeños se ha encargado solo Romero "yo me llevo un porcentaje por haberlo conseguido, por la parte comercial, lo organizamos así".
Farlands, partiendo de una idea de EricRod
Actualmente Romero y Benítez están centrados en dos proyectos que lleva al entrevistado a decir que se le puede considerar "el músico de los creadores de contenido". Uno de ellos es Farlands, el juego que está desarrollando Jandusoft basándose en una idea de EricRod, del canal de Youtube Leyendas y Videojuegos y un experto en juegos de granjas.
Benitez dice de EricRod: "Es un cerebrito, un crack que ha sacado ya dos juegos de mesa. Tiene muchísima experiencia en ese tipo de juegos y ha querido sacar un juego sin pretensiones. Es un juego que se está desarrollando con calidad. Sin desmerecer a los demás, hay tal organización y está todo tan bien hecho que da gusto. Una de las cosas que más agradecemos Carlos y yo es que en este sector muchas veces está ninguneado el tema de la música, hay veces que te dicen que necesitan 12 temas y se los mandes y ya. Tenemos poca participación en el desarrollo y eso limita muchísimo la creatividad. Con Farlands estamos desde el primer momento, tenemos una sistemática de trabajo, de reuniones regulares, de seguimiento diario... Estamos involucrados en todo el proceso", afirma Benítez.
La implementación en el juego
En la música de un videojuego hay dos partes, explica, una la creación de la música en sí y otra la implementación en el motor, que requiere saber utilizar el middleware necesario como Wwise o FMOD Studio. "En Farlands estamos metidos en todo eso y la verdad es que está siendo muy divertido. Después de todo lo que he visto, tiene todo un proceso tan bien y todo tan siguiendo el calendario y con un equipo muy bueno, que es importante. Ha recibido críticas de que es un influencer que quiere hacer un jueguito, pero depende de cómo lo esté haciendo y en este caso Eric está totalmente involucrado hasta el punto de que está desarrollando el juego, no es alguien que va a poner su nombre o tiene una idea y que otros la hagan, está trabajando como uno más y aprendiendo un montón, y el equipo de profesionales es muy loco. Tenemos a Jandusoft y personas que trabajan el pixel art que es una locura".
Destaca Benítez que EricRod ha creado una "tremenda cantidad de lore" para el juego, lo que les ayudó para encontrar el tono de la música, "se ha buscado ese punto aventurero pero con música que recuerde un poquito a los 16 bits en las percusiones y que tenga ese tono espacial. Antesdeayer terminé el tema de uno de los planetas y esta semana (por la semana pasada) tengo que ponerme con otro. Carlos se está encargando más de la parte de sonido. Es un juego en el que vas a pasar muchas horas farmeando, por lo tanto necesitas que la música no sea pesada, que ya es difícil de conseguir porque haces un loop que a lo mejor dure 8 minutos y que tenga descansos para que el jugador no diga que quita la música porque no la soporta más y los sonidos que sean un poco Nintendo, agradables, que juegas un Animal Crossing y son casi ASMR", añade.
Bestiario, un proyecto de elyuste con Loulogio
El segundo proyecto creado e impulsado por creadores de contenido es Bestiario, que nació como idea de elyustey tiene a Loulogio como director de arte. Benítez niega que esté trabajando en los dos juegos por ser él mismo youtuber, "tanto en Farlands como en Bestiario había varias personas que optaban a hacer la música y cada uno hacía su propuesta con su presupuesto. Eso de los amiguismos no ha sido en nuestro caso".
Explica el entrevistado que Bestiario es un proyecto bastante más ambicioso que Farlands, por lo que le quedan unos tres años de desarrollo. "De momento, la gente que está en el proyecto es muy buena. Tenemos a Loulogio haciendo el arte y el resto del equipo son superprofesionales. Esperemos que salga todo bien", apunta Benítez.
En busca del tono de Bestiario
En Bestiario todavía están buscando el tono. Según define Benítez lo que quieren, "no se puede evitar la comparación con Persona y Yuste es un apasionado de Persona y su música le gusta mucho pero quiere que haya una parte española. Estamos buscando el equilibrio, no queremos solamente meter un rollo funky de Persona con una guitarrita española, queremos algo más de fundamento en la música. Por ejemplo, uno de los temas que se puede escuchar en el Kickstarter y que compusimos para el combate, va a ir cantado y la melodía la está tocando un teclado porque es una versión muy prematura de la música y yo me basé en el adaggio de El Concierto de Aranjuez, aunque es un tema muy cañero de boss. Ahora estoy con otro sobre El Amor Brujo de Manuel de Falla, que si es español no sea solo flamenquito olé olé. Tenemos una historia de grandes compositores en España y queremos tirar por algo moderno, que es lo que estamos haciendo, pero que se vean un poco reflejados los grandes clásicos que tenemos en España". Bestiario está en preproducción aunque confía Benítez en ponerse más intensivo el trabajo una vez termine la campaña de microfinanciación, a las 13 horas del domingo 3 de marzo.
Enoc Enocguitar Benítez en 5 preguntas
1- En Bestiario el protagonista ataca con la guitarra, ¿te sientes representado? Creo que hoy es la primera vez que te veo sin guitarra.
Tengo tres aquí detrás. Pues me hizo ilusión ver que el protagonista tenía la guitarra, que es un objeto que canaliza la magia y cuando le veo que da guitarrazos a los enemigos me da un poquito de cosa.
Me ha hecho muchísima ilusión entrar en Bestiario porque creo que puedo desarrollar a nivel creativo. Yuste me deja explorar muchísimo. Ahí le estoy metiendo el dedo un poco porque hay grandes luthiers españoles de guitarras y tengo contacto con algunos. Creo que podemos hacer alguna colaboración y meter alguna guitarra. Sí, me hace ilusión que el protagonista lleve una guitarra; de hecho, va a haber alguna skin de la guitarra, va a estar muy chulo.
2. ¿Cuál es tu compositor favorito de videojuegos?
Tengo varios. Austin Wintory desde luego. Me encanta el alma que pone a sus composiciones. Me impresionó mucho Assassin's Creed [Syndicate], que siempre ha tenido una melodía cromática y llega Austin Wintory y mete una orquesta haciendo de todo.
También me apasiona muchísimo Christopher Tin, el del Baba Yetu, es un crack. También lo era Jeremy Soule, pero ya no.
3. He visto que el canal está un poco abandonado, ¿te cansaste o es el exceso de trabajo?
Es el exceso de trabajo. Lo últimos que he subido incluso no tiene ya nada que ver con la música porque me metí a hacer no-hit y me hice Dark Souls II y tuve un bum. Era pandemia también y todo el mundo empezó a crecer en números. Ha sido fruto de mi vida nómada. Por trabajo de Sevilla pasé a Extramadura, a Canarias, León, volví a Sevilla y luego a Eibar año y poco, y ahora San Sebastián... Al final no tenía los medios para hacer covers. Se me ve que estaba con un portátil, con la guitarra y se había difícil porque no es lo mismo que tener ya tu sitio y hacerlo siempre de la misma manera y tener todo a mano. Se me hizo complicado y lo fui dejando.
Tengo el trabajo, la música que estamos haciendo, proyectos personales, escribiendo un libro y quiero estudiar cine... son muchas cosas y no me da la vida. El año pasado me casé por segunda vez, la definitiva y ahora estamos enfrascados en la casa, me gustaría ser papa... Quisiera retomarlo en algún momento porque me gusta, me lo paso bien grabando pero este año creo que va a ser centrarme en los dos juegos. Es posible que de Farlands antes de acabar el año vayamos a tener una alfa y, por tanto, tengamos mucho trabajo, y Bestiario a ver cómo se va desarrollando este año. Más otros proyectos que hay pendiente.
La musica de videojuegos se va situando ya en una posición por debajo de mi trabajo pero por encima de todo lo demás que estaba haciendo.
4. ¿Cuál es el cover de los que has hecho que más te gusta?
El de Skyrim es muy especial porque fue el primero y el que lanzó esto mucho pero te diría uno que siempre me ha gustado muchísimo que es el de Shadow of the Colossus, porque, además, le metí violín, las percusiones las hice con los hierros del protector de un ventilador que tenía en casa...
Luego hay algunos que a nivel técnico me gustan más porque ya me lo había currado un poco, otros que me gustan porque la propia música del juego me flipa, como The Binding of Isaac, que la música es muy chula.
¿Es en el que utilizas el instrumento africano?
Sí, se llama udú. Hubo un momento en que empecé a intentar metiendo más cositas, no solo la guitarra, tenía el udú, un clarinete...
Tengo una anécdota con el cover de Fallout 4, que no es de los que más me gustan porque creo que está desafinado, pero me llegó un correo de Bethesda para el E3, que querían ponerlo en directo, no recuerdo el año. Me lo mandaron al correo de Youtube, porque no tenía puesto el correo personal en el canal, y me lo enviaron como mensaje privado de Youtube. Yo lo vi un par de semanas antes de que empezase el E3 y contesté rápidamente pero me dijeron que habían tenido que buscar a otro porque no había tiempo ya. Eso sí me jodió.
5. ¿A quién te gustaría que entrevistásemos?
A Jonathan Jonroru Romero. En mi vida he visto a nadie trabajar el píxel a la velocidad que lo trabaja y es una locura. Le están llamando hasta para hacer videoclips de cantantes conocidos. El otro es el animador, Miky Apoonto Arias.
