Rockstar Games ha anunciado que la solución creada por un fan para optimizar los tiempos de carga en GTA Online de PC se hará oficial en una futura actualización. El jugador encontró una manera de reducir las cargas en un 70 % modificando el código con el único inconveniente de ser un poco complicado y no para el usuario medio. Básicamente, el problema se origina por un cuello de botella en la CPU cuando se inicia GTA Online y "resolverlo no debería llevar más de un día para un único desarrollador". Gracias a su detallada explicación del problema Rockstar hará las modificaciones oficiales en una futura actualización.
"Probablemente esto no resolverá los problemas de carga para todos, puede haber otros cuellos de botella en diferentes sistemas, pero es una gran laguna que no sé cómo Rockstar ha pasado por alto en todos estos años", dijo t0st en el mensaje original. Grand Theft Auto 5 se lanzó en PC en 2015 y seguramente la desarrolladora sólo se ha centrado en añadir nuevo contenido para GTA Online, no en revisar el código desde su lanzamiento.
Ahora en un comunicado oficial Rockstar dice que "tras investigarlo, podemos confirmar que lo que hizo el jugador t0st revela un aspecto del código relacionado con los tiempos de carga para la versión de PC de GTA Online que podría ser mejorado. Como resultado de estas investigaciones hemos hecho algunos cambios que se implementarán en una próxima actualización". No se pone pone fecha para su lanzamiento y tampoco se menciona si la reducción del tiempo será ese 70 % que estima el jugador, pero sin duda debería ser una gran noticia para los millones de jugadores que aún están jugando a la vertiente multijugador de GTA 5.
Rockstar recompensará al usuario con 10.000 dólares
Rockstar confirmó que se había puesto en contacto con t0st para "agradecerle el esfuerzo" y el jugador ha confirmado que la compañía le ha recompensado con 10.000 dólares por medio del programa Bug Bounty, que normalmente está reservado para la localización de bugs de seguridad o piratería, pero en este caso han decidido hacer "una excepción". Esta es una práctica habitual de muchas compañías: ofrecer una compensación económica a los hackers que encuentren -e informen de manera privada- los fallos en la seguridad de un servicio o programa.
