La demostración de Unreal Engine 5 funcionando en PS5 destacó por dos tecnologías que prometen revolucionar los juegos en la nueva generación: Nanite y Lumen. La primera es una herramienta virtual que permite a los desarrolladores crear tantos detalles geométricos como el ojo puede ver gracias a los micropolígonos -es decir, utilizar los modelos de la más alta calidad sin apenas impacto en el rendimiento-, mientras que Lumen es un sistema de iluminación global que responde con velocidad inmediata a los cambios de escena y luz. Según la última información, Epic Games espera que se pueda utilizar también en los juegos que funcionen a 60 imágenes por segundo de PS5 y Xbox Series X.
Durante Unreal Fest Online, el vicepresidente de ingeniería en Epic Games Nick Penwarden comentó sobre Lumen que uno de los objetivos que buscan mejorar es el objetivo de alcanzar 60 fps en la nueva generación de consolas -actualmente lo hace a 30 fps-.
"Lumen es una ambiciosa tecnología y actualmente corre a 30 fps en las nuevas consolas. El equipo trabaja duro para optimizarlo y estamos apuntando a 60 fps en su lanzamiento. Aunque Lumen es bueno en superficies sólidas, ahora no soporta reflexiones en objetos tipo espejo. Estamos trabajando en el detalle del trazado para reducir la dispersión de la luz y conseguir mejores resultados en los ajustes de la arquitectura". También estarían buscando opciones para que los desarrolladores puedan elegir entre calidad y rendimiento.
"En resumen, Lumen funciona hoy en las nuevas consolas, tiene grandes características y da espectaculares resultados para iluminación dinámica como puedes ver aquí y en otros ejemplos de la demo. Estamos increíblemente emocionados de ver lo que los creadores de contenido pueden lograr con el poder liberado de Nanite y Lumen trabajando en conjunto".
Buscando el fotorealismo
Unreal Engine 5 permitirá acercarse todavía más al fotorealismo y los gráficos generados por ordenador. En concreto, Lumen renderiza reflexiones infinitas en escalas de kilómetros y milímetros para que la iluminación siempre responda con dinamismo a los eventos del entorno como cambiar el ángulo del Sol a una determinada hora del día, encender una linterna o abrir un boquete en el techo, y siempre habrá una luz indirecta que se adaptará de forma acorde. De esta manera se eliminan muchos pasos intermedios que hacían falta para determinar las tan conocidas luces volumétricas de la actual generación.
