EA Sports ha convertido a FIFA en una de las sagas más icónicas y poderosas a nivel económico gracias tanto a las millones de unidades que se venden con cada entrega como por sus criticados micropagos en forma de sobres o cajas de botín para conseguir jugadores y mejorar las plantillas en FUT, el modo estrella del juego que nos permite formar nuestro equipo de ensueño.
Estas loot boxes son tan rentables para EA como criticadas por muchos jugadores e incluso ya hay varios países que se han puesto en marcha para prohibirlas o regularlas de alguna forma tal y como quiere hacer España con su anteproyecto de ley de cajas de botín, el paso previo a una ley que buscará evitar que los menores de edad puedan acceder a este tipo de contenido o que haya sistemas "que permitan limitar voluntariamente el dinero y tiempo gastados en estos mecanismos".
Sin embargo, EA Sports parece ser ajena (o querer serlo) a toda esta polémica y además asegura que estas cajas de botín forman parte de lo que la gente ama de FIFA: "Creemos de todo corazón que Ultimate Team y los packs de FUT son una parte de FIFA que los jugadores aman. A los aficionados les encanta que el juego refleje la emoción y la estrategia de construir y administrar un equipo. Dar opción a los jugadores de gastar dinero si quieren es justo", comenta un responsable de EA a Eurogamer.
Además, la empresa estadounidense también asegura al mismo medio que solo uno de cada 10 jugadores de FIFA utilizan dinero real para comprar cajas de botín, algo que además les supuso 1600 millones de dólares en ingresos en el año 2020.
FIFA 23, el último FIFA
Estas declaraciones para defender las cajas de botín llegan semanas antes de que FIFA 23 salga a la venta (lo hará el 30 de septiembre) para convertirse en el último FIFA de la historia, ya que a partir del año que viene la saga cambiará de nombre y adoptará el de EA Sports CF.