DOTA es uno de los mejores ejemplos del valor e impacto que tiene la comunidad modder en esta industria. Lo que comenzó como un mod para Warcraft 3 acabó convirtiéndose en un género propio que creó escuela, como bien demuestran el exitoso League of Legends o los próximos Smite y Guardianes de la Tierra Media, todos ellos deudores de este mod. Pero para que DOTA no caiga en el olvido, el equipo de desarrollo de Ice Frog lleva trabajando desde hace unos años en su segunda parte, la cual lleva en fase beta desde hace bastante tiempo. De hecho, la expectación por esta secuela es tal que ya se han celebrado torneos oficiales a nivel internacional sin haber salido el juego todavía, lo que demuestra la clara intención de Valve de llevar DOTA 2 a lo más alto de los e-Sports.
Pero dejando los preámbulos a un lado, ¿qué es DOTA 2 y qué novedades introduce? En esencia podríamos resumir su mecánica de juego diciendo que nos encontramos ante exactamente el mismo juego que su primera parte, aunque adaptado a los tiempos actuales gracias al motor Source de Valve y a las posibilidades sociales que permite Steam.
Por tanto, volveremos a combatir en un mapa con tres caminos principales divididos a su vez por una zona intermedia en forma de jungla donde podremos encontrar monstruos que nos reporten experiencia adicional. Las batallas serán en equipos de cinco contra cinco y nuestro objetivo será llegar hasta la base del rival y destruirla. Pero esto no será tan sencillo, ya que primero tendremos que destruir las torres que hay en cada uno de los caminos para que los creeps de nuestro equipo (unos monstruos que se generan en nuestra base y avanzan incansablemente en grupo por las calles) puedan llegar hasta la base rival.
Al comienzo de una partida, todos los personajes comienzan con nivel 1 (el nivel máximo de cada partida es 25) y una determinada cantidad de oro para invertir en la tienda. Lo habitual es que los equipos se repartan de forma que haya dos jugadores cubriendo las calles laterales y uno el del centro, aunque también existe la posibilidad de que uno de ellos se vaya a la jungla para subir de nivel matando los enemigos que se encuentran en ella. A partir de aquí todo se convierte en una carrera para conseguir más oro y experiencia que nuestros rivales. El oro nos permitirá acceder a mejores objetos y por cada nivel que subamos podremos mejorar nuestras estadísticas o nuestras habilidades. Cada héroe tiene por norma general cuatro habilidades: tres normales y una definitiva, aunque encontraremos variantes de todo tipo, ya que existe una amplia variedad de personajes, estando todos ellos muy diferenciados entre sí y proponiendo estilos de juego únicos.
Para conseguir estos recursos el método básico será el de matar los creeps del equipo rival intentando darles siempre el último golpe para llevarnos una cantidad de oro extra, al mismo tiempo que intentamos mantener a raya a los héroes rivales para dificultarles las cosas mientras buscamos el mejor momento para atacarles y acabar con ellos. Si conseguimos tumbar a alguno de los jugadores enemigos además de ganar oro y experiencia, conseguiremos tiempo para farmear creeps tranquilamente y avanzar hasta las torres enemigas, ya que nuestro rival tardará un poco en revivir en su base (a menos que decida pagar una determinada cantidad de oro para revivir instantáneamente).
Pero claro, también hay que tener en cuenta que en cuenta que esta estructura de partida no es para nada rígida y solo actuaremos así durante los primeros minutos, ya que una de las claves del éxito es saber cómo y cuándo movernos entre las diversas calles para realizar emboscadas y pillar con la guardia baja a nuestros rivales, por lo que la comunicación con el resto de miembros de nuestro equipo es fundamental, para avisar de posibles emboscadas y organizar nuestros ataques y defensas, algo especialmente importante en los momentos más avanzados de la partida, donde se suelen producir batallas con todos los jugadores de la partida implicados.
También hay que tener en cuentas ciertas peculiaridades del mapa. Existen varias tiendas y de distinto tipo repartidas por todo el escenario. Encontraremos tiendas normales en las cuatro esquinas del escenario (por lo que solo podremos usar tres, ya que dos de las esquinas son las bases de los equipos) y dos tiendas secretas en la jungla, donde podremos comprar objetos exclusivos que no se encuentran disponibles en las normales. Como ir a las tiendas suele suponer que dejemos vía libre a nuestro rival para que avance y se haga más fuerte mientras vamos hacia ella, cualquier jugador del equipo podrá comprar un animal de carga al que le podremos encargar que vaya a la tienda, recoja nuestro pedido y nos lo traiga sin que nos tengamos que mover del sitio. Eso sí, hay que señalar que pueden matarlo por el camino si consiguen interceptarlo y que solo puede realizar un encargo a la vez, por lo que si lo está usando otro jugador tendremos que esperar a que quede libre.
Finalmente, otro aspecto muy importante lo encontramos en las runas, las cuales se encuentran en los laterales del río central que hay en el mapa y que reaparecen cada dos minutos. Estas pueden ser de distintos tipos y nos darán ventajas temporales, como un aumento de daño, velocidad o regeneración de vida. Además, para darle un toque más estratégico podemos comprar una botella para guardarnos la runa y usarla en un momento más conveniente.
Como podréis comprobar si alguna vez jugasteis al DOTA original, la esencia del juego sigue intacta, ya que se ha mantenido hasta la posibilidad de destruir los árboles, convirtiéndose en uno de esos raros casos en los que la falta de innovación no se convierte en un pero dado lo estudiada, refinada y equilibrada que ya estaba la jugabilidad del primer título.
Al igual que prácticamente cualquier MOBA, la barrera de entrada para nuevos jugadores de DOTA 2 es muy alta. No nos encontramos ante un juego fácil ni mucho menos. Actualmente hay más de 90 personajes (todos desbloqueados desde el principio) y una gigantesca cantidad de objetos para ir potenciándolos en cada partida, que prácticamente nos obligarán a "estudiar" y practicar con bots de dificultad configurable durante unas cuantas horas antes de adentrarnos en una batalla real si no queremos que nos machaquen por desconocer el uso y la potencia de nuestras habilidades, lo que hace el rival o los objetos que más nos convienen según la situación ante la que nos encontremos. Además a todo esto hay que sumarle que dentro de un equipo existen diversos roles (como iniciar combates, aguantar daño, dar apoyo, etcétera), por lo que tenemos que procurar escoger a un personaje que se adapte bien a nuestro estilo de juego y que tenga un papel que encaje con las elecciones de nuestro grupo.
Para hacer todo esto menos duro, hemos visto que el juego incluirá tutoriales y misiones de iniciación, así como un programa que nos permitirá jugar con un mentor que nos enseñe las claves de la victoria. Por desgracia estas opciones todavía no han sido activadas en la beta, por lo que no hemos podido comprobar su funcionamiento ni su utilidad. Otra alternativa la encontramos en la sección "Aprender", donde tendremos unas detalladas fichas con todas las características, historia y habilidades (con vídeos incluso) de cada uno de los personajes del juego para ayudarnos a familiarizarnos con ellos.
Tenemos que hacer una mención especial al genial servicio de streaming que se ha incluido, donde podremos ver partidas en directo o descargar repeticiones, todo ello con una interfaz totalmente configurable para seguir las partidas tal y como queramos, ya sea desde la perspectiva de un héroe en concreto, moviendo nosotros la cámara libremente, etcétera. Además, gracias a esta característica podremos aprender mucho viendo cómo juegan los mejores jugadores del mundo, por lo que se acaba agradeciendo lo cuidado que está el añadido.
En cuanto a los modos de juego, encontraremos diversas variantes generalmente relacionadas con la forma de seleccionar personajes, ya sea libre, escogiendo de uno en uno y prohibiendo héroes, o incluso de forma aleatoria entre una selección de 20 personajes al azar. Aquí encontramos también una de las mayores y mejores novedades que se han introducido: el modo Diretide. Esta modalidad (lanzada para celebrar este Halloween) nos propone competir por caramelos en una auténtica batalla campal, mientras un gigantesco ser se va paseando por el mapa haciendo de las suyas y pidiéndonos caramelos a cambio de dejarnos vivir. Además de original resulta endiabladamente divertido dado su carácter directo, por lo que supone un soplo de aire fresco muy bien recibido.
Otro de los aciertos de Valve ha sido permitir que la comunidad participe de forma activa con sus creaciones. Gracias a Steam Workshop podremos crear nuestras propias piezas de equipo para configurar la apariencia de los personajes (no afectan en anda al rendimiento ni a las estadísticas de los héroes, ya que son puramente estéticos), subirlas y que la comunidad vote si quiere que nuestra creación se convierta en un objeto oficial del juego. Para poder conseguir estas piezas de equipo existen dos métodos: por un lado podremos comprarlos a cambio de dinero real en la tienda y por el otro podremos jugar partidas para tener la posibilidad de que nos toque alguno como premio. Lo bueno de este sistema es que los objetos que consigamos son intercambiables con otros jugadores, algo que animará mucho la actividad de la comunidad.
Gráficamente el título no luce nada mal, se mueve bastante bien en casi cualquier PC y tiene una buena dirección artística (el mapa revisado con temática de Halloween es digno de elogio), así como unas buenas animaciones y efectos gráficos para las habilidades. No es que sea un título rompedor en el aspecto técnico, pero tampoco es que necesite serlo. En lo que respecta al sonido, el doblaje inglés es realmente bueno, con voces e interpretaciones muy bien escogidas para los héroes. La música por su parte pasa totalmente desapercibida, ya que no tiene gran relevancia y estaremos pendientes de otras cosas más importantes que harán que no nos fijemos en ella.
En conclusión, Valve tiene un producto gratuito entre sus manos realmente entretenido, divertido y con una profundidad de juego y posibilidades que abrumarán a cualquiera que no esté dispuesto a dedicarle unas cuantas horas en aprender a jugar primero, pero que hará las delicias de los jugadores más dedicados y ávidos de un gran juego competitivo de primer nivel. Solo queda esperar a que se haga el esperado anuncio de su lanzamiento oficial para que todo el que quiera pueda disfrutarlo y podamos comprobar su resultado final, pero de momento, la cosa pinta realmente bien.
