Análisis de République (iPhone)
Juegos ambiciosos en iOS hay unos cuantos. Exclusiva, por ejemplo, tenemos la saga Infinity Blade, con la que se inauguraba el Unreal Engine y que, sin duda, es un juego que si aparece en otro dispositivo que case bien con el juego (por ejemplo, Kinect), da el tono perfectamente. No tan exclusivo, pero que sea original de iOS tenemos otros, como Sword & Sworcery: EP, que además de ser uno de los juegos indies de su año, puso a Capybara Games en el mapa y posteriormente apareció en otros sistemas, siendo parabienes para el juego allá donde va. O hay conversiones de grandes juegos para iOS, como la saga Grand Theft Auto, Jet Set Radio, The Walking Dead o Runaway.
Pero Republique, la ópera prima de Camouflaj, es especial y distinto de todos ellos. En primera instancia, es un juego que se pensó de manera especial para dispositivos táctiles. De hecho, si no ha salido aún en Android será, seguramente, por temas de publicidad o de piratería (no os descubrimos nada nuevo si os contamos que la tasa de instalaciones no autorizadas en estos dispositivos supera el 90% mundial).
Se lanzó una campaña de Kickstarter donde, a pesar de la fama de sus autores (Ryan Patton, conocido por haber trabajado en Kojima Productions y 343 Industries) y de la buena pinta del juego, tuvieron que "rebajarse" a sacarlo en ordenadores porque si no, no alcanzaban la cantidad necesaria ni de broma (de hecho, la subida de los últimos días es, cuanto menos, sospechosa).
Y cuando lo juegas detectas que sí, que es un juego pensado, absolutamente, para tabletas (o para móviles, no en vano recibes bastantes llamadas al móvil dentro del juego). Cómo te hablan los personajes, cómo interactúas con el entorno, cómo está organizada la interfaz del juego, todo eso hace pensar que es difícil verlo de manera correcta en otro dispositivo (aunque sin duda podría ser convertido y muy bien a PlayStation Vita o Nintendo Wii U).
Desde que en Abril de 2012 consiguiese su financiación, los que nos dedicamos a mirar en profundidad el mundo del videojuego le llevábamos siguiendo la pista. No han trabajado demasiado el hype, hay que decir, pues desde entonces hasta hace poco no hemos tenido noticia alguna del juego. Ni apariciones en otros medios, ni work in progress, nada de nada (salvo, supongo, para los backers) nos hacía pensar que el desarrollo del juego iba en condiciones. Además, la fecha estimada de lanzamiento fue hace medio año, pero por suerte hace poco nos comentaron que sí, que sería lanzado a final de año.
Y así, ya lo tenemos entre nosotros. En perfecto castellano. Episodio 1, costando más que la media de los juegos de iOS, pero sin llegar a las exageraciones de Square Enix o 2K (algo menos de 5 euros el primer episodio). Durando poco más de 3 horas la partida. Y ofreciéndonos mucho, la verdad.
Republique nos pone en la piel… de nosotros mismos. El jugador no aparece nunca en pantalla, y su rol es ayudar a Hope, una chica, a escapar del lugar donde la han retenido para ser "reeducada" (en el juego dicen readoctrinar) tras haber leído cosas que no debería.
Volvemos a estar en una distopía totalitarista, que es algo que empieza a estar de moda (aunque a pesar de que varios juegos, Bioshock, Dishonored, Beyond Good & Evil lo empleen últimamente, y tal vez esté de moda por temas como la crisis, es una temática que está lejos de agotarse como puedan serlo los zombis, debido a su mayor profundidad como tema), en la que no se permite el libre pensamiento, con sus personajes a favor y en contra de manera radical. La historia, por cierto, no por más o menos manida está mal contada, y muchos de los personajes son realmente interesantes, mientras que los guardias no son otra cosa que personas reales que han ayudado a sacar el juego adelante mediante Kickstarter. Y no es éste el único punto de unión que tiene con el mundo real, lo que hace mezclar la seriedad de la historia con un punto de humor realmente interesante.
La manera de ayudarla es una mezcla entre Tiny Thief y Ghost Trick. Podemos indicarle a Hope dónde acudir tocando la pantalla, pero realmente nosotros nos movemos de cámara en cámara, moviéndolas para poder tener el mejor ángulo posible para cada ocasión, y al entrar en el "modo especial" (Omni View en el juego) podemos realizar acciones especiales, como abrir puertas, activar determinados interruptores, leer lo que aparezca en ciertos lugares, y más adelante, conforme vayamos adquiriendo las habilidades para tal fin, escuchar cintas, interceptar correos electrónicos o distraer guardias.
Realmente sí podemos darle más órdenes a Hope, como robar a los guardias, coger cosas que aparezcan en pantalla, o usarlas en determinadas ocasiones, pero la gracia del juego es que Hope es bastante autónoma, de manera que cuando le digamos que se ponga detrás de un seto se agachará para no ser vista y además investigará cerca de sus alrededores, sin perdernos de vista, y cuando parezca que va a ser capturada, si tiene un bote de spray, lo usará sin que nosotros digamos nada para quitarse de encima al guardia de turno. Es algo bien llevado a cabo, y que sólo se romperá un poco cuando el juego interprete que en vez de mover la cámara estamos indicando a Hope donde acudir, o que el camino que tome para llegar a algún sitio no es el que nos esperamos.
El otro punto interesante de Republique, y que lo distingue del 99% de los juegos que salen a la venta para iOS, es el presupuesto con el que se ha realizado, y el cómo se ha usado. No tenemos sólo texto para contarnos la historia, sino que también está locutado. Y no son voces cualquiera, sino que entre los dobladores nos encontramos a Jennifer Hale (Kotor, Mass Effect, Bioshock Infinite), David Hayter (Snake en Metal Gear Solid), Dwight Schultz (Murdock en el Equipo A…), el músico es Jun Fukuda (Killer 7, Lollipop Chainsaw, Samurai Champloo). El motor gráfico, si bien es el archiconocido Unity, viene ayudado por la tecnología facial Gameface (y se nota, pues son lo mejor del juego a nivel visual). Si no fuera por lo feos que son los guardias, podríamos estar hablando de un juego de consola reciente (no de Xbox One o PlayStation 4, eso por supuesto).
En resumidas cuentas, creemos que Republique es, a día de hoy, un imprescindible en iPad, un juego interesante en iPhone, y que ya veremos cómo está cuando salga para ordenador u otras plataformas. Accesible, interesante, bien realizado, novedoso, tiene todo lo necesario para triunfar, para gustaros, y para cambiar un poco la idea de que los juegos para móviles o tabletas se hacen con cuatro perras. No os asustéis (no deberíais) por su precio (4,49 €), poneos en el rincón más cómodo de la casa que tengáis, enchufaros los cascos, y disfrutad del primer capítulo de la historia de Hope. O de Republique.