En un año repleto de grandes juegos de acción, el nuevo Call of Duty se ha llevado todos los palos, incluso antes de haber podido demostrar sus virtudes, desde el primer tráiler. La nueva ambientación, más futurista que nunca, no fue bien recibida, y encontró un fuerte contraste con su rival Battlefield, que daba un atrevido paso atrás, volviendo al pasado.
Pero irónicamente esta nueva ambientación es lo que mejor le ha sentado al Call of Duty de este año, que nos ofrece una excelente campaña para un jugador, espectacular, divertida y variada, que está sorprendiendo a todos los que le están dando una oportunidad, dejando los prejuicios a un lado. Puede que el multijugador sí sea lo de siempre, demasiado parecido al de Black Ops III, pero en líneas generales es un juego de acción muy completo, con una de las mejores campañas de toda la saga.